La psicóloga penitenciaria María Yiela explica cómo deben afrontar los padres de Daniel Sancho su condena

Esta mañana hemos conocido la condena a la que se enfrentará Daniel Sancho por asesinar de forma premeditada a Edwin Arrieta: cadena perpetua. De esta manera, ha conseguido evitar la pena de muerte, el peor de los castigos posibles. La lectura ha durado aproximadamente 2 horas, tiempo en el que el hijo de Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo ha roto a llorar al conocer lo que le espera. 

Dentro de unos días, será trasladado a la prisión Nakhon Si Thammarat, conocida como el 'Gran Tigre', pues termina devorando a sus propios presos. Su construcción está pensada para acoger a no más de 3.500 presos, aunque en estos momentos tiene a casi 7.000. Y, sus condiciones, no son las mejores desde luego. 

¿se le puede ayudar de alguna manera?

Parece que de nada ha servido la lucha de su familia, que se ha visto frustrada después de varios viajes desde España para poder acudir a los juicios. Tras vivir un momento como el de hoy, es a los padres a quienes se les suele decir que "esta es una realidad y que toca seguir luchando", pues "deben mantenerse fuertes por el hijo", explicaba María Yiela, psicóloga penitenciaria y responsable de la Pastoral Penitenciaria del Arzobispado de Madrid. 

Ahora bien, ¿qué se le puede decir a una persona como Daniel Sancho en estos momentos? "Lo primero es estar a su lado, escucharle e intentar entenderle" para tratar de que él mismo vaya "preparando su día a día", el cual "podría haber sido peor". Y es que si recurren, cabe la posibilidad de que la situación empeore y se le condene finalmente a pena de muerte. 

No cabe duda de que todo este año de espera para la lectura de la sentencia ha sido duro y el que se haya podido concretar ayuda, pero "la incertidumbre es horrorosa". Este ha sido un proceso duro para todos, para su familia y para él mismo, "sin olvidar el sufrimiento de la familia de la víctima". 

¿PUEDE TRATAR DE HACER JUSTICIA LA FAMILIA DE EDWIN ARRIETA?

Es normal que ahora se sientan algo más aliviados, pero necesitarán "defenderse y sentirse seguros", aclaraba la psicóloga. Aun así, "la venganza es algo que no debemos alimentar", ya que es totalmente perjudicial. Lo que ayuda es el perdón, pero sentir que Daniel Sancho "va a recibir el castigo que ha hecho al otro también es reconfortante". 

Desde luego, es una situación muy distinta a la que él vivirá a partir de hoy. "El miedo que tiene es terrible, pues ya conoce donde está". Pero, aunque sea cadena perpetua, no hay que olvidar que "pasados unos años hay una serie de beneficios". En definitiva, "hay que ser muy delicado para acompañarle en el proceso", finalizaba.