"España aporta el 1,28% del PIB a la OTAN y Donald Trump va a pedir que suba hasta el 5%, esa va a ser buena"

Donald Trump ya es Mr. President. Hemos visto a los fastos, qué diferencia con hace cuatro años, cuando aquella toma vergonzosa y deplorable del Capitolio que el propio Donald Trump empujó. Pero, en fin, dejemos atrás los rencores. Por intentar ser, cuando menos original en análisis, todo el mundo está con lo mismo, las incógnitas, el empresario, las sanciones, los inmigrantes... Con todas las incógnitas abiertas, me quiero fijar en tres ángulos que ya sabemos de esta nueva etapa para la historia del mundo de la segunda presidencia de Donald Trump. 

La primera, ¿quién vendrá después? Porque todo el mundo da por hecho, y cuentan que él mismo, que esto van a ser cuatro años y no habrá una segunda, que sería tercera legislatura. Atentos a Marco Rubio, su ministro de Exterior, secretario de Estado de origen cubano, que tiene hoy todas las papeletas para ser el siguiente sucesor de Trump. Marco Rubio. Anda que nos mola con ese nombre hispano. 

Segundo, tema Oriente Medio, muy interesante. La prioridad absoluta es que Israel y Arabia Saudí establezcan relaciones diplomáticas. Recordemos que eso fue, en el fondo de la cuestión, lo que provocó la matanza de octubre por parte de Hamás en los kibutz israelíes. Arabia Saudí e Israel, absolutamente clave para Donald Trump. 

Y tercero, la OTAN y, por lo tanto, la guerra de Ucrania, la guerra de Putin contra Ucrania y contra Occidente. Un dato, el país de la OTAN que más invierte es Polonia con el 4,12%. El que más. ¿El que menos? España, con exactamente el 1,28%. Bueno, pues Donald Trump, y no le falta razón, va a pedir que los Estados miembros inviertan el 5% de sus respectivos productos interiores brutos en defensa. Estamos en el 1,28%, esa va a ser buena, y Donald Trump va a pedir el 5%. 

Marco Rubio, Arabia Saudí e Israel y el gasto en defensa dentro de la OTAN. Tres claves muy importantes de esta nueva etapa del mundo con Donald Trump como presidente.