Expósito: "El 26 de mayo nos jugamos Europa"

Como estamos con las cosas del colchón del matrimonio Sánchez, con el juicio del procéss y repartiendo las magdalenas de Errejon y Manuela Carmena casi se nos olvida que además de elecciones generales, municipales y autonómica tenemos elecciones europeas.

Hace poco me contaban la importancia de Europa en nuestro día a día y nuestro desconocimiento. ¿Sabías que el 60 por ciento de las leyes que nos afectan provienen de Europa? Luego hay un 30 por ciento que dependen del Estado y el resto un 10 por ciento más o menos dependen de las comunidades autónomas, regiones, landers o departamentos y una pizca de los ayuntamientos.

Dicho lo general, me quiero centrar en una clave que resumen muchas cosas y que aparece en la ultima encuesta hecha publica por el parlamento europeo. La ultraderecha eurófoba dará la campanada en las elecciones del 26 de mayo. El movimiento Europa de las naciones y de las libertades con el frente nacional de Marine le Pen, la liga italiana de Matteo Salvini y el Partido de la Libertad austríaco conseguiría nada menos que 22 escaños más, rozando los sesenta.

Y enlazo este titular con lo que está pasando en Francia en las ultimas semanas, profanadas 96 tumbas en un cementerio judío de Francia. En Quatzenheim, cerca de Estrasburgo. Las sepulturas han amanecido marcadas con esvásticas y pintadas de azul y amarillo... una de ellas llevaba la inscripción “los lobos negros alsacianos”, un grupo violento alsaciano de finales de los años setenta.

Una veintena de partidos políticos franceses han llamado a manifestarse en París contra el antisemitismo, pero la realidad es muy tozuda. Los actos contra los judíos aumentaron un 74% en 2018. Hasta un retrato de Simone Veil, histórica política francesa, europeísta, ministra y superviviente del holocausto, apareció pintado con una esvástica.

En este sentido, lo que ocurra en Francia es más que simbólico, aunque sirva como paréntesis, para enmarcar qué está pasando en Europa. Y vuelvo a las elecciones europeas. El centro derecha continuará siendo el grupo más numeroso en el Parlamento Europeo, pero perdería 34 escaños, quedándose en 183. Los socialdemócratas también reducirían sus eurodiputados, concretamente 51, hasta los 135.

Los liberales pasarían del cuarto al tercer puesto al ganar siete eurodiputados, desplazando al grupo de conservadores y reformistas del ECR, muy tocados por la marcha de los british por el Brexit. Pero insisto, quien dará la campanada en todos los sentidos, de acuerdo con este sondeo, es la utraderecha eurófoba.

Y un dato. El partido la liga, del actual ministro del interior italiano, Matteo Salvini, se podría convertir en el segundo partido nacional con mayor representación en la Eurocámara por detrás de los demócrata cristianos alemanes de Angela Merkel, la CDU.

Casi como anécdotas. Los verdes, por su parte, con siete escaños menos, contarían con 45 escaños, y cabría recordar que habrá 46 escaños menos por la marcha del Reino Unido de la Unión Europea (el total de asientos bajará de 751 a 705).

En resumen, las elecciones europeas son trascendentales; nos jugamos, y no exagero, los próximos años de nuestra propia civilización. Y no deberíamos olvidar una cosa. Con todos los problemas esta nuestra vieja Europa es la mejor región del mundo para vivir, para trabajar, para ser mujer o para ser pensionista y para ser inmigrante también.