La sorprendente anécdota que le sucedió a un miembro de La Linterna al pasar a BUP: "Había un señor"
Jon Uriarte y Rubén Corral han hecho en 'La Linterna' un repaso de cómo han cambiado las cosas en los colegios desde que no hay exámenes de recuperación en septiembre
Madrid - Publicado el - Actualizado
2 min lectura
Que se eliminaran en su momento los exámenes de recuperación en septiembre ha acabado con la mítica frase de verano “o estudias, o no sales por la tarde”. Alguien que puede explicar esto muy bien, y que según Rubén Corral “ya suspendía en los tiempos de Platón” es Jon Uriarte. Jon ha reclamado que se le da mucha importancia a salvar al “lince ibérico o a la ballena jorobada”, pero no se le dedica la atención suficiente a “ese ser que suspendía siempre para septiembre, el repetidor ¿Acaso no merece sobrevivir?”.
Según Uriarte, el colegio no es lo mismo sin los repetidores, algo que ha ilustrado con un fragmento del monólogo de Joaquín Reyes en el que dice que en clase solo había tres tipos de estudiantes: “el primero era el gordo, al que se le recordaba que estaba gordo con motes tan sutiles como fanega o zampabollos, luego estaba el empollón, y también tenías al repetidor, al que le griseaba el mentón y siempre iba en chándal”.
El hablar de repetidores le ha recordado a Rubén Corral, uno con el que compartió clase en primero de BUP: “Llegábamos todos tan contentos porque acababas EGB y había un señor sentado allí. Había repetido 5 veces”. La pregunta que Jon ha lanzado al aire es “¿El repetidor nace o se hace?”, y es que nunca fue fácil ser mal estudiante.
Todo comenzaba con un suspenso al que seguía, como mínimo, una buena colleja, lo que te llevaba a ser, según Uriarte, “un suspendido con galones, no como ahora que suspendes y te llevan al psicólogo”
Al suspender para verano, los padres solían poner al alumno clases particulares para aprobar en septiembre, algo que en ocasiones funcionaba, pero cuando se atragantaba una asignatura muchas veces acababa siendo una tarea casi imposible sacarla adelante, eso sí, a falta de conocimientos, los repetidores tiraban de otras virtudes, como la imaginación, y es que cuando no sabían la respuesta era mucho mejor inventársela, como hizo una Miss que aseguró que “Confucio fue el que inventó la confusión, y fue uno de los chinos japoneses más antiguos”.
Lo único que está claro es que sin los exámenes de recuperación de septiembre la cosa ha perdido gracia, ahora todo se decide entre mayo y junio, y en septiembre solo se espera el nuevo curso, por lo que no podemos extrañarnos de que al salir a la calle y preguntar quién es Adolfo Suárez, algunos jóvenes respondan cosas como que “era uno que pertenece a la dinastía de los reyes o algo, que dio un golpe de estado o algo así”.