"Sánchez escenifica el nuevo giro del Gobierno, de la cara descubierta a la mascarilla"

"El presidente escenifica el nuevo giro del Gobierno. Ha pasado de aparecer con rostro descubierto a llevar una mascarilla en su última visita"

El próximo sábado, el próximo 11 de abril, caduca el permiso del Congreso para el estado de alarma. Pero eso no significa que sea el final de esta situación.

Siendo realistas, muy probablemente, la situación dentro de 7 días, esté todavía lejos de estar controlada con lo que el Gobierno sopesa a estas horas prolongar 15 días más el confinamiento de los españoles, cómo mínimo hasta el próximo 26 de abril.

Este sábado, Pedro Sánchez tiene una nueva reunión con el comité científico. Con las cifras actuales en la mano, casi 120.000 contagios y 11.000 fallecidos en España por COVID 19 la situación no es la deseable para relajar las medidas así que se da por hecho que, esta tarde, en una nueva comparecencia, Sánchez anunciará una ampliación del estado de alarma. Una prorroga que debe autorizar el Congreso de los diputados, previsiblemente en una sesión el próximo miércoles. Así que en teoría, hoy sí, Sánchez va a contactar con los líderes de la oposición... En teoría. Entre otras cosas porque necesita su apoyo para prolongar el confinamiento.

Además, en la comparecencia de hoy puede que empecemos a vislumbrar las medidas que el Gobierno baraja para cuando se relaje el estado de alarma. Sobre la mesa, la todavía posibilidad de que se pueda sacar a los niños a la calle un rato respetando al distancia de seguridad o por ejemplo, dejar salir a hacer deporte. Pero repito, esto se está estudiando para cuando la situación mejore de forma evidente. Por muchas ganas que tengamos, todavía habrá que esperar porque la situación sigue siendo complicada

Lo que puede llegar antes y quizás se anuncie en la comparecencia de la tarde, pueden ser otras medidas como el uso obligatorio o recomendación (ya veremos en qué forma) de mascarillas a la hora de salir a la calle.

USO OBLIGATORIO DE MASCARILLAS

En la cuarta semana de cuarentena el gobierno podría anunciar que hay que usar mascarillas. Nada que decir si no fuera porque hasta hace nada el mensaje oficial era más bien que las mascarillas no eran un elemento demasiado útil para el ciudadano en general... Y una reflexión. Si ya es difícil para los hospitales hacerse con mascarillas, para el resto de ciudadanos de a pié... pues eso, una odisea.

Incluso el presidente Pedro Sánchez ha escenificado este nuevo giro. Sánchez ha pasado de aparecer a rostro descubierto a llevar una mascarilla en la ultima visita que realizó ayer a una fábrica de Móstoles, en Madrid, que ahora mismo está fabricando respiradores.

Mientras tanto la gráfica del coronavirus sigue subiendo en España a la espera de conseguir llegar al deseado punto de inflexión. Los datos no son buenos porque sigue aumentado el numero de personas fallecidas más que el día anterior. Quedan todavía días difíciles, pero empiezan a consolidarse señales de ralentización en el contagio. El virus está perdiendo fuerza de transmisión.

Es bueno empezar a ver los indicios positivos, empezar a ver que el sacrificio que todos estamos haciendo tiene sus efectos. Además del dato que siempre tenemos en positivo, las altas médicas que superan las 30 Mil personas recuperadas, hay otros ejemplos.

Lo encontramos, precisamente, en la Comunidad de Madrid. Es la región más afectada por esta crisis del coronavirus. Más de 34.000 contagiados y casi 4.500 personas fallecidas. De hecho, en el municipio madrileño de Majadahonda se ha habilitado una pista de hielo municipal como tercer tanatorio improvisado en la región. Pues bien, en Madrid, hay datos que aportan algo de luz.

Por primera vez desde que comenzó la crisis de este COVID 19 se ha reducido el número de pacientes en planta y ha caído a la mitad el de los enfermos que esperaban en Urgencias a ser ingresados. También ha descendido el dato de los enfermos que deben permanecer en una Unidad de Cuidados Intensivos en las (UCI), que hasta ahora no había dejado de crecer.

En economía, lo único que parece positivo es que el petróleo sigue desplomado. Pero con la situación de confinamiento poco podemos aprovecharlo el común de los ciudadanos. Al menos, nos queda el consuelo de que llenar al depósito les salga mejor a los profesionales del transporte que siguen estos días al pie del cañón.

Mientras tanto, vemos aterrizar aviones con cuenta gotas con material sanitario de diferentes lugares del mundo, principalmente de China, que ahora está haciendo su particular mes de agosto con el material sanitario.La demanda mundial ha convertido la adquisición de estos productos sanitarios, en un mercado persa, con sus caraduras incluidos. Ocurren cosas como esta, un episodio en el aeropuerto de Ankara, en Turquía.

España había conseguido hacerse con respiradores. Ese avión llega al aeropuerto de Ankara y allí las autoridades turcas comprueban lo que transporta y retienen el material porque se ha ensamblado en Turquía.

Alguien dice, “oiga ese material ha sido adquirido por administraciones españolas” (como el Gobierno de Navarra, por ejemplo), y los turcos como si nada, deciden que ellos también lo necesitan y lo mantienen donde está.

La historia parece increíble, pero la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya lo confirma y viene a decir que son lentejas... Que no han podido pasar de ahí en su negociación con las autoridades turcas, de un compromiso para que, “en el plazo de unas semanas” se entregue ese material a España. Como no hay prisa ninguna... (ironía) Es todo surrealista.

A lo mejor es mucho pedir, pero habrá que esperar a que esto no vuelva a pasar.