Antonio Herraiz: "Qué habría sido de la crisis de Marruecos sin el amparo de Bruselas"
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Se cumple una semana de la entrada masiva de inmigrantes a Ceuta. Siete días después ya no es noticia la presencia de personas intentando salvar el espigón que separa la frontera entre España y Marruecos. Ahora el problema es otro, aunque el Gobierno de Sánchez trate de desviar el foco.
Las autoridades de Ceuta aseguran que todavía hay 3.000 personas en la ciudad. Son el 30% de los que se colaron el pasado lunes de forma irregular, muchos engañados por el gobierno marroquí con falsas promesas, incluida la de ver a Cristiano Ronaldo jugar un partido de fútbol.
En Ceuta no hay espacio para todos y la situación de los menores es cada vez más preocupante. Muchos quieren volver, se ven solos, sin asistencia, pero no les reclama nadie y la ley impide el retorno. Otros dicen que antes morir que volver a Marruecos.
Esto en Ceuta. En Melilla han seguido los intentos de salto a la valla, aunque sin éxito. Entre el jueves y el viernes lograron entrar unas 70 personas. La novedad es que ahora son marroquíes y no subsaharianos, que llegan con escaleras y que intentan incluso entrar por ríos.
Hoy, en Bruselas, Pedro Sánchez asiste al Consejo Europeo extraordinario. El conjunto de la Unión sabe cómo frenar el drama de la inmigración. Regando de fondos a los países de origen, incluido Marruecos. Cuando allí no cumplen, la respuesta está clara. Cerrar el grifo. Esta mañana, en Herrera en COPE, el presidente de Melilla, hablaba de ese pulso entre Marruecos y España. La Unión, en este caso, también ha servido de barrera salvadora: “Europa tiene que tomar cartas en el asunto. Es muy crucial lo que está pasando, hay que controlarlo. No nos olvidemos que todavía estamos con el covid, no nos olvidemos que estamos en alerta 4. Y esto va a continuar”.
Qué habría sido de este Gobierno sin el amparo de Bruselas. En esta crisis diplomática y en tantas otras cuestiones. Ahora, sobre la mesa, Sánchez y su ministra de Exteriores tienen un problema. Todo partió con el ingreso en un hospital de Logroño del líder del Frente Polisario. Entró con identidad falsa. Una vez se recupere, ¿van a obligar a Brahim Ghali a rendir cuentas con la justicia española? ¿Le van a dejar salir con la misma estrategia con la que le dejaron entrar? Pues ahí tienen el marrón. Luego dirán que todo fue imprevisto y que nadie sabía nada, como hace justo una semana cuando Marruecos permitió la entrada de 10.000 personas.
Por lo demás, desde hoy, británicos y japoneses pueden viajar a España sin restricciones. Esto pasa ya con los ciudadanos de otros países con baja incidencia por el coronavirus como Israel, China, Australia o Nueva Zelanda. El sector turístico español está pendientes de todos los clientes, pero los británicos no son uno más. En 2019, último año de normalidad antes de la pandemia llegaron 18 millones de británicos que dejaron 18.000 millones de euros.
¿Es una buena noticia para el turismo español que les levantemos las restricciones? Sí, pero hay un matiz importante. Reino Unido no les prohíbe a sus ciudadanos que vengan a España. Pero deberán hacer una cuarentena de 10 días a la vuelta a su país, a parte de aportar varias PCR. Esto provoca que todavía no se haya registrado mucho movimiento de reservas. Antonio Gutiérrez tiene una agencia de viajes con un volumen alto de negocio con estudiantes británicos: "Son requisitos tan restrictivos que realmente desincentivan la salida de estos países. En el momento de la llegada tenemos que estar 10 días de autoconfinamiento. Y previamente tenemos que habernos hecho un test negativo, pero una vez que llegamos tenemos que estar diez días de autoconfinamiento, y el segundo día tenemos que hacernos una PCR y el octavo también".
Y no hay que olvidar el mensaje que siguen lanzando las autoridades británicas. Directamente, desaconsejan viajar a España si no es estrictamente necesario. Toca confiar en la buena evolución de la pandemia en nuestro país para que cambien ese discurso.