Dos coronas, 2000 invitados y una ausencia destacada: el mundo entero pendiente de la coronación de Carlos III

Casi nueve meses después del fallecimiento de Isabel II, su hijo, Carlos III, va a ser coronado rey este sábado 6 de mayo en Londres. Todo el mundo tiene la mirada puesta en la capital británica, y es que ha llegado el día que Carlos III lleva esperando desde hace décadas. La capital británica está engalanada para vivir un acontecimiento histórico, la primera coronación en 70 años.

De Westminster a Buckingham Palace

La entronización de los nuevos monarcas comienza a las 11:00, hora londinense, y va a tener lugar en la Abadía de Westminster, el templo que ha cogido los actos más importantes de los reyes ingleses desde el año 1066. Hacia allí se van a dirigir, saliendo desde Buckingham Palace, Carlos y Camila en la carroza del Jubileo de Diamante tirada por seis caballos grises de Windsor y construida para conmemorar el 60 aniversario del reinado de Isabel II en 2012.

Van a atravesar de The Mall, uno de los paseos más emblemáticos de Londres, donde desde el miércoles ya se nota el ambiente festivo y la expectación por ver a los nuevos reyes. A la ceremonia van a asistir más de 2000 invitados, nada comparado con los 8000 que vieron en directo la coronación de Isabel II. Entre ellos habrá miembros de las casas reales de todo el mundo y Don Felipe y Doña Letizia van a ser la representación española.

¿Cómo debe comportarse Carlos III durante la ceremonia?

Sin duda, más allá de Camila y de la ausencia de la duquesa de Sussex, el protagonista de la jornada es Carlos Felipe Arturo Jorge, conocido por todos como Carlos III. ¿Cómo debe comportarse el monarca durante la ceremonia? ¿Qué se puede esperar de él? Marina Fernández, experta en protocolo, ha explicado en COPE que tendrá "una actitud indudablemente solemne, institucional", pero teniendo en cuenta que estamos en 2023 "no sería ningún problema, es más, sería incluso positivo, si el rey dejará mostrar alguna emoción".

El nuevo monarca portará dos coronas distintas: "durante la ceremonia será coronado con la corona de San Eduardo, qué es de oro macizo, recubierta de piedras preciosas y pesa 2 kg. Para abandonar la Abadía de Westminster en su trayecto hasta Buckingham Palace y en ese saludo desde el balcón lucirá la corona imperial, qué es bastante más ligera y práctica", apuntaba la experta en protocolo.

Además de dos coronas, van a utilizarse dos carruajes. Después de la ceremonia, que se espera que dure unas dos horas, los monarcas volverán por el mismo recorrido en una carroza diferente, esta vez a bordo del carruaje dorado de Estado que se estrenó en 1762 y que va a ir tirado por 8 caballos.

El papel de Harry y la ausencia de Meghan Markle

Ya de vuelta en Buckingham Palace, tendrá lugar un saludo desde el balcón. Allí no estará presente el príncipe Harry, que pondrá la nota más discordante al evento. Harry sí va a estar presente en la ceremonia, pero sin su esposa, la duquesa de Sussex, que se ha quedado en California.

Aun así, el papel de Harry va a ser anecdótico, ya que, como ha explicado el experto en casa reales, Fernando Rayón, en COPE, Harry sabe muy bien cómo comportarse en estos casos. "Aunque vaya a ser uno de los centros de atención, yo creo que hubiera sido peor que no estuviera. Creo que si va a ser un poco el contrapunto en el que se van a fijar las cámaras, pero Harry está en la línea sucesión al trono y sabe cómo tiene que comportarse en este caso. No va a hacer nada que pueda perjudicar ni a su padre ni a la imagen de la monarquía", ha apuntado el experto.