El colegio de Louro que enseña cosiendo con las vecinas del pueblo de La Coruña: “Todos aprendemos de todos”

En 'La Noche de COPE' hablamos este miércoles sobre la elección del mejor colegio para nuestros niños. Ahora en España los niños acuden al curso que les corresponde según su edad. Hace décadas, sobre todo en las zonas rurales, las clases eran mixtas. Como había pocos niños se mezclaban y el profesor les atendía según sus necesidades. Así es el colegio que dirige Silvia. Está en la pequeña localidad de Louro, en la provincia gallega de La Coruña.

¿Qué mejor que fijarse en el patrimonio prehistórico arqueológico que tienen allí mismo? Es verdad que con 40 alumnos todo es más manejable, pero también hay que regirse por la imaginación. 40 alumnos que se reparten en aulas mixtas, y un claustro de profesores con 3 docentes fijos y 2 itinerantes. “En las aulas mixtas con tres edades en infantil están niños de tres, cuatro y cinco años y luego hay dos aulas en Primaria, una con alumnado de seis, siete y ocho años y luego hay otra aula de 4º 5º y 6º que tienen 10 y 11 años”.

"En las escuelas rurales nos faltan niños en los pueblos, así que no hay otra solución. Pero como abordas el día a día, se realizan muchas actividades en las que los niños se ayudan unos a otros y la actividad tiene distintos niveles para poderse adaptar a las distintas edades de los niños trabajando por proyectos”, explica Silvia, que apunta que “es más fácil adaptarse al aprendizaje de cada niño”.

El proyecto

Para Silvia, lo mejor es que “aquí puedes ver la evolución”. “O sea, los coges desde pequeñitos, que entran con 3 añitos, hasta que salen en 6º de primaria, entonces es todo como muy familiar”, recalca. Para los niños también es una gran experiencia porque “juegan fuera, comparten los espacios, la playa...”. Entonces “a nivel social y a nivel humano” es algo “muy enriquecedor”. “Conoces muchísimo a las familias, a los abuelos...”, concreta y es que “son niños que conviven con los abuelos cerca todavía entonces todo muy enriquecedor”.

En este colegio han apostado por un proyecto muy especial en el que los viernes acuden unas profesoras muy singulares. “Había que presentar un proyecto de tecnología y de ciencia, entonces partimos del estudio del patrimonio arqueológico de Louro”, comienza explicando Silvia. “Nosotros lo relacionamos con la tecnología a través de los textiles, introduciendo la electrónica y la programación en las telas”, señala.

Paola Guimerans está siendo clave formar al profesorado en este sentido, pero, “por otro lado” necesitan “el apoyo de que los niños cojan ese hábito de coser”. “Entonces vienen las mujeres del pueblo, que en nuestro pueblo hay muchísimas mujeres que cosen, de una asociación folklórica que hay aquí, por lo que también vienen con el traje tradicional”, explica. Hacen una doble enseñanza, ya que “enseñan a los niños” y “ellas están abiertas también a aprender a coser leds”. “Nosotros aprendemos todos de todos”, recalca Silvia.