"Bienvenida sea el agua si llega de forma controlada, a ver si este año hay suerte y no la acabamos echando de menos"

Esto es un no parar. Ya llevamos dos semanas de lluvia constante en España y lo que nos queda. Ahora tenemos encima los coletazos de la borrasca Jana e inmediatamente después llegará Konrad, que a partir de este jueves seguirá dejando más lluvia por toda España. 

Si miro el mapa de la AEMET, la alerta amarilla está situada para esta tarde noche entre el sur de Castilla- La Mancha y el norte de Andalucía y también en una franja interior de Cataluña, desde Tarragona a Barcelona. Esto no significa que en el resto de España ya no llueva, significa que a priori no lo hará con tanta intensidad.

Hoy justo hemos conocido también las cifras actualizadas de los embalses y reservas de agua.

Es un dato récord para lo que estamos acostumbrados con la sequía en España. Ahora mismo están de media al 61% de su capacidad. Por encima incluso de la media de los últimos 10 años y en algunos casos la situación obliga a desembalsar agua.

Si a esto le sumas el deshielo y la lluvia constante, tenemos como resultado una situación en la que es prioritaria la vigilancia en los cauces de los ríos porque los caudales han aumentado considerablemente.

Hoy, por ejemplo, ha habido más de 200 viviendas desalojadas en Santa Cruz de Retamar en el provincia de Toledo o se han suspendido las clases en varios centros educativos de Talavera de la Reina, en esa misma provincia. En Castilla y León, también se sigue muy de cerca el curso del Duero o el Adaja, que pasa por Ávila. En general, en toda España no se quita el ojo de los grandes ríos y de sus afluentes.

Se nota que con la experiencia y los estragos de la dana de Valencia, ahora mismo estamos más sensibilizados o concienciados con la fuerza del agua y desde luego, nunca sobra la prudencia.

Pero ¿por qué está lloviendo tanto en este mes de marzo? O mejor dicho, ¿por qué no para de llover en España? Pues hoy la Agencia Estatal de Meteorología ha dado una explicación que a priori parece sencilla.

Por lo visto en los mapas, hay un anticiclón situado entre el norte de Europa y el Reino Unido. Es un anticiclón potente, poco habitual en esas latitudes, pero está bloqueando el camino que siguen las borrascas y estas acaban por tomar una ruta más hacia el sur pasando directamente por España. Por eso, nos dicen, aquí no para de llover.

En cualquier caso, nos puede molestar y condicionar los planes, pero bienvenida sea el agua si llega de forma controlada. A ver si este año hay suerte y no la acabamos echando de menos.