Los problemas de trabajar pensando en las vacaciones: "La rutina, aunque la percibamos negativa, es necesaria"
En La Tarde, con Pilar Cisneros y Fernando de Haro, la psicóloga Olga Merino nos explica los problemas de vivir siempre esperando el siguiente puente
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Faltan dos domingos para el próximo puente y solo 10 domingos para las vacaciones de verano. Dicho así no parece mucho. Es lunes de Pascua. La gente está en el trabajo o regresando de tus vacaciones de Semana Santa justo ahora en las Comunidades que hoy es Festivo: Cataluña, Comunidad Valenciana, Baleares, País Vasco, La Rioja y Navarra
Lo de acabar de regresar de unas vacaciones y pensar inmediatamente en cuanto queda para las próximas quizá es un acto inconsciente sin la menor importancia, algo lógico después de pasar unos días de descanso, desconexión y disfrute o tal vez dice mucho más de la vida que tenemos de lo que podemos pensar.
Luego está la pequeña venganza malsana de los que no se han podido coger vacaciones de Semana Santa y que la practicamos estos días en que todos están de bajón, pero esta es otra historia.....Pasar al debo frente al quiero es complicado.
Olga Merino Suárez es psicóloga responsable del grupo de salud laboral del Colegio de Psicólogos de Madrid y coordinadora Regional de prevención de FREMAP. Explica lo que es el estrés adaptativo, un "cuadro clínico" que se corresponde a la "depresión postavacacional".
"Las personas tenemos" en cada trabajo "una parte de obligación y una parte de satisfación", apunta la psicóloga. Y hay gente que aunque esté "en la parte placentera, ese inicio de descanso supone un y qué hago ahora". Por eso, aclara que "en cierto modo puede darse a la inversa".
"La rutina tiene que ver con la parte emocional negativa, cuando hay un acostumbramiento", explica la psicóloga. Sin embargo, "la rutina, aunque la percibamos de forma negativa es necesaria" para "sentirnos seguros y saber qué va a pasar". En esos casos lo "dejamos de valorar", pero al final, "tiene más que ver con nuestra percepción que con la realidad".
"Ese período de descanso suele ser para parar y reflexionar". Entonces, debemos aprovehcar para "ver qué no nos gusta y no dejarnos llevar". "Es un período para valorar lo que tenemos y lo que queremos" y olvidamos a veces "lo bueno que tenemos y dejamos de percibirlo así".
Por eso, Merino aconseja "hacer actividades nuevas y placenteras y relajar los horarios asociadas al mundo laboral". También apunta que es bueno "saber relativizar y posicionarnos en qué cosas positivas tenemos en la vida". Cree que es positivo pensar "cómo podemos hacer para esa parte de responsabilidad poder trabajarlo".
La edad influye en las personalidades y conforme pasan los años porque "las expectativas no son las mismas que cuando somos más mayores". Aunque "depende de cada persona", sí que "hay sesgos o tendencias generacionales de lo que esperan, esa perspectiva de futuro".
Un estudio recoge que es hay que poner el foco en la salud mental en el ámbito laboral, la cuestión mental es la segunda causa de baja laboral sobre todo en mujeres y menores de 35 años. "La realidad es que la patología es algo que se incrementa en al alza en los últimos cinco años", aclara la psicóloga. "Es la segunda causa laboral de días de baja", entorno a "100 días" y son procesos "largos y muy limitantes" para las empresas.
Para que se sientan contentos en su trabajo "la salud mental es una obligación de la empresa". Por eso, las empresas "cada vez se interesan más por ir más allá".
Para los que vayan de puente en puente "es importante centrarnos en el presente", aconseja Merino. Es bueno "que encuentren su parcela de satisfacción" y señala que "a veces son pequeñas cosas que nos aportan satisfacción". Pero en todo caso, la psicóloga habla de un "equilibrio entre la obligación y la satisfacción".
Podemos sufrir un síndrome de “burnout” trabajador quemado. Pero el trabajo también tiene grandes ventajas y no solo por el mero hecho de tenerlo y ganar dinero con él. Recordar que el trabajo tiene sus ventajas nos ayudará a superar los síntomas de tristeza y estrés que a veces pueden aparecer al fin de las vacaciones. El mejor consejo es construir una vida suficientemente satisfactoria como para que volver de vacaciones, no sea excesivamente traumático. Si volvemos a una vida satisfactoria, la cosa no será tan mala.