Una experta desvela los productos clave para ahorrar y comer sano: “Están a buen precio”

Todo el mundo busca comer de la forma más saludable posible. Sin embargo, la subida del precio de los alimentos complica mucho esta tarea. Muchos de los productos de la cesta de la compra suben por encima del 20%. La leche, los huevos, el aceite,...

Por eso algunos consumidores han optado por comprar productos menos saludables pero más baratos, para poder mantener la misma cantidad de comida pero sin renunciar a nada. Diana, madre de tres hijos, se lo reconoce a Pilar Cisneros, codirectora de ‘La Tarde’: “He intentado no reducir las compras, pero sí que son de peor calidad”. Para que no se note el impacto en la cesta de la compra, aclara que continúa dándole “caprichos” a sus vástagos, “pero mucho menos que antes”.

Lo que sí que mantiene es la compra de fruta. En su casa, no faltan: “Mis hijos comen 25 piezas a la semana”. Entre ellas están presentes siempre las manzanas, las peras o los plátanos. Aunque, lamenta “no poder darles mejor calidad en las comidas” porque “ha incrementado mucho la cesta”, a pesar de que ella ha sido siempre “muy exigente”.

Sus hábitos han tenido que cambiar: “Estoy tirando mucho por verduras congeladas y ultra procesados porque son más baratos”. Le gustaba cocinar, pero ha tenido que frenarlo: “Ahora no me lo planteo”.

Productos saludables a buen precio

La nutricionista Beatriz Robles ha complementado la explicación de Diana rechazando que todos los alimentos congelados son malos: “Hay algunos procesados que son saludables” y que “nos pueden servir de ayuda en estos momentos tan difíciles” porque “están a buen precio” dentro de que todos los costes están muy elevados. Por ejemplo, las verduras congeladas como “las legumbres cocidas o los pescados en conserva”. Los que sí son negativos son “los ultra procesados como las salchichas”.

Uno de los puntos a mejorar, según destaca la nutricionista es “la información nutricional” porque a veces “los alimentos más asequibles pueden ser las más saludables”. Es el caso de los “yogures naturales” que son más baratos que, por ejemplo “unas natillas”. Señala la importancia de que “lo que dejemos de meter en la cesta de la compra”. Productos como la bollería porque “tiene un marketing muy importante”, pero no podemos dejarnos llevar por ello, como apunta Robles: “Tenemos que tener una mejor planificación”. Aun así, reconoce que “las personas con menos recursos tienen menos acceso”, y eso es lo que más preocupa, “el acceso a esos alimentos”.