"Ahora entendemos mejor el Año Franco que se ha inventado pedro sánchez"
Escucha el monólogo de Jorge Bustos del martes 7 de enero
- 3 MIN
Es la una, las doce en Canarias.
Qué tal, soy Jorge Bustos, te doy mi más calurosa bienvenida a este martes 7 de enero de 2025. Qué ganas tenía yo de volver a ponerme delante de este micrófono de Mediodía Cope. Me lo he pasado muy bien en estas breves, casi anecdóticas, vacaciones de Navidad, y espero que tú también hayas podido descansar, pero si te digo la verdad ya tenía ganas de volver. Las vacaciones están bien, pero la radio está mejor. Y este 2025 va a ser el año de la radio, porque van a pasar muchas cosas decisivas en el mundo y en España, y vamos a estar aquí para contártelas.
Esta misma mañana ya nos ha traído bastante ajetreo político. Dos barones socialistas acaban de tirar la toalla: Luis Tudanca en Castilla y León y Juan Espadas en Andalucía. No estamos hablando de dos críticos como Page y Lambán, precisamente: Tudanca y Espadas han sido sanchistas hasta la humillación, porque hace falta tener tragaderas para defender la amnistía en Sevilla o en Valladolid. Estos dos ya ex barones han tragado sanchismo como campeones, han aplaudido la amnistía y el cuponazo y lo que hiciera falta con tal de complacer a Pedro. Pero no ha sido suficiente: el césar es caprichoso y tenía otros planes.
¿Cuáles son esos planes? Pues está claro: colocar a peones aún más manejables para asegurarse una sumisión absoluta con vistas al futuro ciclo electoral. Incluso con vistas al postsanchismo: Pedro intenta dejarlo todo atado para sucederse a sí mismo a través de sus ministros. Lo hizo purgando a Lobato para imponer a Óscar López en Madrid, a Diana Morant en Valencia y ahora pretende imponer a María Jesús Montero en Andalucía y a Pilar Alegría en Aragón. Después del culebrón de abril, cuando Pedro fingió la pájara de los cinco días, este 2025 empieza con un arreón cesarista de Moncloa. El secretario general que reconquistó el trono reivindicando las primarias y el federalismo frente al malvado aparato hoy aplica el rodillo desde Madrid sin ningún miramiento.
¿Y qué han dicho sus víctimas más recientes? Pues esta mañana han comparecido el andaluz y el castellanoleonés con sus propias cabezas en la mano, pero han fingido que se van encantados y por voluntad propia.
Claro, qué van a decir. Si se van diciendo la verdad -y la verdad es que la democracia interna ha desaparecido del PSOE-, entonces pierden el carguito de consolación con el que Pedro acostumbra a recoger del suelo a los árboles que él mismo ha talado: una embajada, una subdirección o un consejo de administración, para que el escarmiento sea más llevadero, para que el estómago quede agradecido y nadie le monte motines. Pero aun así, las palabras de Espadas insinúan una decepción evidente con las maniobras de Ferraz. El hombre se va con dolor, como un fusible fundido. Pero así
funciona el sanchismo y así se las gasta el amigo de Puigdemont, de Koldo y de Aldama: don Santos Cerdán, el ejecutor de Pedro para los trabajos sucios.
Ahora entendemos mejor el Año Franco que se ha inventado Pedro Sánchez: a la sede de Ferraz le está creciendo su propio valle de los caídos.