"Montero suma ahora el papel de escudo personal de Pedro Sánchez en las sesiones de control. Todos los palos van para ella"

Vengo del Congreso de los Diputados, de cubrir la sesión de control. Hoy la protagonista ha sido María Jesús Montero, que hasta ahora trabajaba en tres sedes diferentes: en la sede del Ministerio de Hacienda, en Ferraz como número dos del partido y en un despacho de Sevilla donde aspira a construir una candidatura que pueda hacerle frente a Juanma Moreno. Pero a todos esos curros, como cualquier mileurista pluriempleado, la vicepresidenta Montero suma ahora el papel de escudo personal de Pedro Sánchez en las sesiones de control. Todos los palos van para ella: los de la oposición y los de sus propios socios. Incluso los de su vecina de escaño, piel con piel, Yolanda Díaz.

No se calman las aguas de la pelea fiscal en el seno del Gobierno a cuenta de la tributación del salario mínimo. Pero no es solo una pelea entre Sumar y PSOE. Es de todos los partidos del hemiciclo contra el PSOE. Hoy he escuchado a muchos portavoces -Miriam Nogueras de Junts, Ione Belarra de Podemos, Feijóo y Tellado y Bendodo y Ester Muñoz y Juan Bravo por el PP- arremeter contra una misma María Jesús Montero. No me extraña que se ponga mala, claro. Si yo fuera ella me volvería a la cama. Pero lo que no puede hacer es mentir groseramente como ha hecho hoy: afirmar sin despeinarse que este Gobierno nunca ha subido los impuestos a las clases medias y trabajadoras. Todos los españoles sabemos que eso es mentira con solo echar un vistazo a nuestra nómina, a la factura de la luz o al ticket de la cesta de la compra.

Montero ha mentido groseramente al afirmar sin despeinarse que este Gobierno nunca ha subido los impuestos"

Jorge Bustos

Copresentador de 'Mediodía COPE'

Montero tiene el récord absoluto de presión fiscal de la democracia. Ha batido incluso la marca de Montoro. Y los españoles se han hartado. Españoles de todos los colores políticos, ojo. Hay un hartazgo transversal con este infierno fiscal que han detectado perfectamente Junts, Sumar, Podemos y el PP, aunque luego cada uno ofrece una solución distinta. Unos quieren pegarle el hachazo a la banca, como Podemos. Otros como los separatistas, con su discurso xenófobo de siempre, dicen que están hartos de subvencionarles la vida a los andaluces y a los manchegos y a los murcianos (lo ha dicho tal cual hoy la tal Miriam Nogueras, la portavoz de Puigdemont en el Congreso). Y el PP quiere llevar a toda España sus políticas liberales de bajadas de impuestos que está llevando a cabo en las autonomías que gobierna.

Así que María Jesús Montero está sola. Solo hay un diputado más solo que Montero: José Luis Ábalos. El hombre que lo fue todo en el PSOE y en el Gobierno, que llevó al poder a Pedro Sánchez ayudándole en la estrategia de las primarias y defendiendo su moción de censura. El hombre que ha sido condenado al ostracismo por los mismos que tanto le debe y que tanto le aplaudían. El hombre que hoy denuncia en una entrevista concedida a EL MUNDO que se siente usado como un cortafuegos.

Pero mucho cuidado con las amenazas que formula Ábalos en esa entrevista, en vísperas de acudir a declarar como imputado ante el Supremo. Porque se compara con Amedo. Ábalos avisa de que el caso va a escalar. Y hace una advertencia siciliana: “Si voy a la cárcel, no iré solo”. Este debe de ser el Gobierno que vino a regenerar la democracia".