Pilar García Muñíz: “El problema no es tanto el envejecimiento como la baja natalidad”

Hoy te saludo desde el interior de la región de Murcia. Estamos en Ojós, a unos 25 kilómetros al norte de la capital murciana. Y,¿por qué hemos venido hasta aquí?

Hoy los comunicadores de COPE estamos en diferentes puntos para hablar de la España Envejecida En toda Europa estamos viviendo un fenómeno de progresivo envejecimiento de la población, lo que el Papa Francisco tildó de “Invierno demográfico”, pero en España está siendo más acusado.

La edad Media en nuestro país, a día de hoy, es de 44 años. Dicho así, no parece exagerado pero es la primera vez que se llega a esta cifra y llama la atención la evolución que hemos tenido. En 1975 esa edad media era de 33 años.

Vamos a sumar otra variable. España la segunda natalidad más baja de la Unión Europea con 1,26 hijos por mujer. En cuanto a número de nacimientos estamos en cifras similares a las de 1941, cuando España acababa de salir de una Guerra Civil. La situación a día de hoy es otra muy diferente (gracias a Dios) pero este dato es similar y con perspectiva de seguir bajando.

A todo esto hay que sumar otro punto de inflexión. En 1973, hace 50 años, la esperanza de vida en España rondaba los 72 años. Hoy es de 86 (afortunadamente). Todo esto nos convierte en un país cada vez más envejecido.

Estamos en Murcia, una región que sin embargo tiene la edad media más baja de España con 41 años. Es un dato en positivo comparado con el resto del país pero tampoco permite escapar de ese invierno demográfico del que hablamos. En esta región el 16% de la población tiene más de 65 años pero en los municipios como este de Ojós que nos acoge, ese porcentaje se eleva por encima del 20%. El envejecimiento suele coincidir también con las zonas menos pobladas.

Hay que dejar algo claro. El hecho de tener una población envejecida no tiene por qué ser siempre algo negativo. El aumento de la esperanza de vida, por ejemplo, implica que las condiciones han mejorado considerablemente en España en los últimos años. De hecho, el aumento de esa esperanza es el punto positivo de todo este asunto. ¿Dónde está el problema entonces? En la baja natalidad. Cada vez somos tenemos menos capacidad de mantener el relevo generacional necesario y eso lo vamos a ir notando cada vez más.