El alcalde de Simancas pide tranquilidad a los vecinos mientras buscan al cocodrilo

El pasado sábado, por la mañana, en la comisaría de Simancas, una localidad de Valladolid, sonó el teléfono.

Francisco Sánchez, policía local, conocido como Paco, comenzaba su jornada. Así que atendió la llamada pensando que habría algún altercado derivado de la noche. Pero no. Parecía que alguien había visto un cocodrilo en el río Pisuerga, en la zona de la Pesqueruela. Esta información coincidió con la de otra persona que el día anterior había avisado del mismo hecho.

Se puso en marcha para ver qué ocurría por la zona y comprobar que, seguramente, se trataba de una confusión. Sin embargo, al llegar certificó que el vecino que había hecho el avistamiento tenía razón. El policía se encontró con el reptil, a unos diez metros, y observó que salía del agua, volvía a sumergirse y de nuevo regresaba a la orilla. Él asegura que el animal estaba tranquilo, “zigzageando” con una parsimonia increíble. Ante esta situación, desalojó la zona sin decir la causa para no asustar a los bañistas y llamó al 112.

Paco reconoce que en sus 18 años había tenido algún episodio rocambolesco, pero no de tal calibre.

Hemos hablado con el alcalde de Simancas, en Valladolid, Alberto Plaza. Nos ha contado que sigue la investigación por parte de la Guardia Civil, el SEPRONA, y expertos biólogos para averiguar de qué animal se trata. Mientras tanto la zona está acordonada. Así que llama a la tranquilidad de los simanquinos. Y concreta que el espacio natural está cerrado solo en la parte final, en la que confluyen los dos ríos, el Pisuerga y el Duero.

El caso es que la noticia ha hecho que los habitantes reconozcan su incertidumbre, y anhelen la captura del cocodrilo, como nos han contado en 'Mediodía COPE' algunos de ellos.

Ante la duda sobre el origen de esta aparición, y, pensando que se puede tratar de la mascota de alguien que haya decidido soltarla, hemos recordado el espacio de los fósforos de 'Herrera en COPE' de esta mañana. Una oyente ha contado que se trajo un cocodrilo en el año 89 de Egipto, en un tupper. No tuvo problemas para "pasarlo" en el aeropuerto. Aunque había consultado a experto de un zoológico sobre los cuidados con que debía criar al reptil, con la llegada del verano murió y ahora lo tiene disecado en su casa.