Julio González de Buitrago, el cocinero de Moncloa

Llegó a la cocina del Palacio de la Moncloa con el Presidente Suárez y se despidió a los pocos días de que llegara a la presidencia del Gobierno el presidente Rajoy, "me jubilé, me había quedado dos años más porque el presidente Zapatero me pidió que acabara la Legislatura" cuenta el cocinero Julio González Buitrago en COPE.Después de más de 30 años cocinando, "ahora no cocino, lo hace mi mujer que cocina muy bien, ahora cuido mi huerto, siembro mis verduras y mis patatitas", en su pueblo en Sotillos de las Palomas muy cerquita de Talavera de la Reina. Si Julio hubiera tenido que agasajar con el almuerzo a los líderes europeos, entre ellos el presidente Mariano Rajoy, que están reunidos en la Cancillería alemana con Barak Obama había preparado: "un consomé al jerez, unos boletus y un solomillo de cerdo ibérico a la mostaza con aceite de oliva". Ahora todo muy preparado los días anteriores al almuerzo o cena, porque "la preparación es más importante que el día de la comida o la cena. Los días previos hay que dejarlo todo muy bien atado porque tienen muy poco tiempo para comer y hay que servirlo en tan solo 20 minutos, si no se van sin tomar el café".De las muchas personalidades para las que Julio González de Buitrago tuvo el honor de cocina, "la Reina de Inglaterra quiso saludarme al final de la comida, aunque no recuerdo que hice ese día".Lo que no olvida Julio son las preferencias a la hora de sentarse a la mesa de cada inquilido de la Moncloa, "el presidente Suárez era el más tiquismiquis, pero le encantaba el cocido madrileño y por la noche los garbanzos fritos. El que mejor comía era Calvo Sotelo. El helado de café era sagrado para José María Aznar. El gazpacho de sandía era preferencia de los Zapatero". Escucha a Julio González de Buitrago en Mediodía COPE