Las tiendas incorporan soluciones innovadoras para adaptarse a la normativa de seguridad

La llegada de la nueva normalidad supone nuevos hábitos de consumo que ya están afectando al sector retail, sobre todo en lo que se refiere a la experiencia de compra en sus tiendas.

Ahora, las prioridades del cliente han cambiado. Priman los criterios de seguridad y salud, más allá de la necesidad de probar o tocar los productos. Además, la nueva normativa de seguridad impone a los retailers medidas concretas que garanticen su seguridad y confianza.

RETOS

Control de aforo en los establecimientos, de la distancia social, desinfección de productos y zonas comunes, el control del uso de mascarilla o sistemas de contacto para el pago con dispositivo y evitar así largas colas, son algunos de los nuevos retos a los que se enfrentan los establecimientos.

La nueva normalidad, explica José María Sánchez Santa Cecilia, CEO de Prodware, compañía multinacional líder en servicios de consultoría para la transformación empresarial, que precisamente ofrece soluciones adaptadas a esta nueva necesidad de las empresas, “implica una nueva experiencia de compra construida a partir de la garantía de seguridad y la ausencia de contacto físico, un concepto completamente diferente al que estábamos acostumbrados".

Los retailers deben adaptarse para cumplir con la normativa y evitar sanciones o cierres de sus establecimientos

Por eso los retailers, señala "deben de adaptarse para ofrecer a sus clientes esa seguridad que demandan, mantener al mismo tiempo la experiencia de compra y cumplir con la normativa para evitar sanciones o cierres de sus establecimientos”.

En este sentido, Prodware Social Distancing, desarrollada por CYou, compañía experta en el desarrollo de soluciones tecnológicas, es precisamente una herramienta innovadora que permite adaptar los comercios a esta nueva normalidad, garantizando esas tres variables.

Gracias a ella el establecimiento puede analizar su situación global en cada momento, la del comprador (sexo, edad, franja horaria, estancia media) y el cumplimiento de la normativa de seguridad, lo que facilita la toma de decisiones a los dependientes en tiempo real, además de reducir los costes de personal hasta en un 50%. Este sistema se integra de forma sencilla con las cámaras de vigilancia ya existentes y puede estar funcionando en cuestión de horas.

¿CÓMO FUNCIONA?

Mediante un sistema de alerta, los empleados pueden conocer en tiempo real, a través de un mensaje de WhatsApp o de mail, cuando se incumple alguna de las medidas sanitarias:

• CONTROLAR EL AFORO.- Para adaptarse a la nueva normalidad es imprescindible que las tiendas sean capaces de detectar el número de personas que se encuentran en tiempo real. Ese control transmite a los clientes la seguridad que buscan.

• DISTANCIA SOCIAL.- Es importante también detectar las situaciones en las que los clientes se salten esa distancia de seguridad para actuar de inmediato. A nadie se le escapan las largas colas para pagar o para los probadores, principales focos de concentración de gente.

• MASCARILLAS.- En este caso el sistema activa una alerta que notifica el acceso a la tienda de un cliente que no la lleve puesta, poniendo en riesgo la salud de personal y clientes.

Desde ya, apoyarse en la tecnología parece clave para conseguir de forma eficiente los estándares de seguridad necesarios para que los establecimientos puedan abrir con total garantía y dar el servicio que los clientes demandan.

La necesidad de una solución innovadora que permita a las empresas garantizar el cumplimiento de la normativa y adaptarse a las cambiantes necesidades de sus clientes, es hoy en día crítica y, además, urgente.