Joseba Arguiñano revela cómo es su padre, Karlos Arguiñano, como jefe y el peso de su apellido: "Se da cuenta"
Joseba Arguiñano ha sido entrevistado en 'Oído cocina' por el lanzamiento de su nuevo libro, 'Cocina con Joseba Arguiñano'
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Karlos Arguiñano es un popular cocinero televisivo que se caracteriza por ofrecer ricas recetas a los espectadores mientras cuenta chistes, analiza la actualidad o cuenta anécdotas de su vida en 'Cocina abierta de Karlos Arguiñano'. Es la naturalidad del presentador lo que siempre ha gustado a la audiencia, dado que muestra sus elaboraciones mientras habla de todo, lo que aporta cercanía para sus seguidores. Asimismo, sus trucos para mejorar las recetas y algunos de los platos más tradicionales siempre ha gustado mucho a sus fieles espectadores, ya que resultan ser muy efectivos.
Este estilo como cocinero lo ha pasado generación tras generación. Esto se debe a que la mayoría de sus hijos fueron contagiados con el amor de su padre por la cocina, por lo que cinco de ellos “gestionan” su complejo turístico que ofrece "cocina de calidad en un hotel con encanto en Zarautz”. El cocinero tiene siete hijos: Eneko, Zigor, Karlos, Martín, Joseba, Amaia y María. Dolo dos se han decantado por no seguir los pasos de su padre. Karlos trabaja en el cine como “director de fotografía", mientras que Amaia es ingeniera y especialista en telemetría, una disciplina que ayuda a los pilotos de carrera a mejorar sus tiempos.
Entre ellos, Eneko dirige la sala y toma los pedidos del público, además de que suele ser el que aparece en los medios. Asimismo, Zigor es el jefe de cocina, aunque en sus ratos libres también participa en algunas competencias como la de Pintxos de Bacalao de Gipuzkoa. Por otra parte, Martín gestiona el complejo familiar. "Tanto mis hermanos como yo nos fuimos incorporando gradualmente (a la empresa). Se fue dando poco a poco, casi sin darnos cuenta. (Mantenemos el buen clima laboral en la familia) Porque siempre hicimos cosas en grupo, en la casa y en el trabajo", explicó Martín en una entrevista.
De igual manera, María ejerce como la otra jefa de cocina. Joseba Arguiñano es el menor de los hermanos, pero el más televisivo gracias a que fue fichado por su padre para 'Cocina abierta'. No obstante, no es la primera vez que el joven se hace hueco en la pequeña pantalla, ya que, anteriormente, se puso al frente de otros espacios como 'Historias a bocados', 'Escapadas con Joseba Arguiñano' y 'Sukaldaria' en EITB y Radio Televisión Vasca. “Está capacitado y gusta mucho, pero es distinto a mí porque creo que tiene mucha más preparación que yo. También es gracioso, tiene buena mano para todo y cae bien, pero no es como yo, también es hijo de su madre”, contaba Arguiñano para 'El Mundo'.
"Mi padre siempre ha sido más un animador"
Como consecuencia, el hijo del mítico chef acaba de lanzar un nuevo libro, 'Cocina con Joseba Arguiñano', en el que cada receta va acompañada de un texto en el que explica lo que significa para él o dónde aprendió a hacerla. Es por esto por lo que el cocinero ha sido entrevistado en 'Oído cocina', donde ha sido preguntado por cómo es Karlos Arguiñano como padre y el peso de su apellido.
"En mi caso, mi apellido creo que siempre ha sido para bien. Nos han abierto muchas puertas, hemos podido aprender en otros sitios, siempre nos han abierto las puertas... Lo he aprovechado todo lo que he podido y nunca me ha pesado el apellido. Siempre lo he tenido y no sé qué es no tenerlo. Entonces, me siento normal, como un Sánchez. Me siento normal", comienza contando el cocinero.
Asimismo, reconoce que, aunque comenzó en el mundo de la cocina con su padre, su "pilar" ha sido su tía Eva: "Me ha tocado trabajar con él, pero una vez ya había aprendido cocina. Cuando entré en el restaurante, él ya estaba en el mundo de la tele, con la bodega... Estaba ya en otros proyectos y nosotros entramos a la cocina, por lo que mi pilar ha sido mi tía Eva. Codo a codo me ha tocado trabajar más con mi tía, con mi hermanos... ".
No obstante, su padre siempre ha estado presente: "Mi padre siempre ha sido más un animador. Más que un jefe ha sido un animador. Siempre no ha vendido, nos ha animado, nos ha felicitado, nos ha dado las gracias... Nunca nos ha dicho lo malo porque él también se da cuenta de que nosotros también nos damos cuenta de lo malo. Cuando a uno no le salen las cosas bien, nos damos cuenta y creo que él tiene esa filosofía de que uno tiene que aprender de sus errores y darse con un canto en los dientes para aprender y hacerte grande".