Así tienen que ser las curaciones para decretar un milagro: "En Lourdes solo se han aprobado el 1%"

¿Te has preguntado alguna vez cómo acredita la Iglesia un milagro? Se trata de un proceso largo, que requiere de numerosa documentación y estudio por parte de expertos. Cada año se registran miles de solicitudes para declarar como milagro una posible curación o hecho que escapa a la lógica.

Es el caso de la Oficina Médica del santuario de Lourdes, que cada año recibe unas cincuenta declaraciones voluntarias y espontáneas, tal y como afirma el responsable de este área del santuario francés, Patrick Theillier: “Desde que se creó la oficina en 1905 tan solo se han aprobado 67 milagros, el 1% de las solicitudes”.

Una cifra que, para Theillier, pone de manifiesto que la Iglesia “no va detrás de los milagros” porque “es muy prudente con estos acontecimientos”.

Documentos y dictamen de peritos médicos: el proceso para aprobar un milagro

“Un milagro podríamos definirlo como una curación que es científicamente inexplicable y que solo se puede atribuir a una intervención directa de Dios”. Así ha definido el término milagro el responsable para la Causa de los Santos en la archidiócesis de Madrid, Alberto Fernández, en 'Mediodía COPE'.

Como ha señalado, la declaración de un milagro es un proceso complejo y largo, tanto en la Causa de los Santos como en la comisión de Lourdes, por ejemplo: “Se examina el caso detenidamente y se pide un dictamen a varios peritos médicos expertos en esta materia”, ha señalado Fernández, quien ha enumerado en once los expertos médicos que examinan las pruebas.

El responsable para la Causa de los Santos ha aclarado que a estos profesionales sanitarios no se les pide opinión sobre si se trata, o no, de un milagro, sino un informe sobre el pronóstico del paciente, el diágnostico, la terapia y el estado actual de la persona sanada: “Cuando la terapia utilizada es insuficiente para explicar el estado actual de la persona a partir del diagnóstico y pronóstico que tenía, podemos hablar de una curación”, ha precisado.

¿Cómo debe ser la curación para ser declarado milagro?

Eso sí, Alberto Fernández ha aclarado que para una curación sea reconocida como milagro ha de ser “inmediata, completa, duradera e inexplicable, que no exista causa-efecto entre la terapia utilizada y estado actual”, ha insistido.

En total, el proceso para que un milagro sea reconocido puede prolongarse durante varios años, aunque menos que una canonización o beatificación, cuando el estudio puede abarcar décadas de trabajo: “Hay que esperar que el enfermo no vuelva a recaer porque tiene que ser duradera. Y luego se recogen las pruebas. El examen de los médicos requiere también un tiempo”, ha explicado.

"Es como si estas personas tuvieran una primicia"

Una vez que todas las pruebas han sido estudiadas, son enviadas y estudiadas en Roma, ya que el Papa es generalmente la única figura con potestad para aprobar el decreto para el reconomiento de un milagro, aunque con alguna excepción: En el caso de Lourdes es el propio comité médico de Lourdes el quie aprueba u reconoce esa curación extraordinaria”.

Preguntado porque solo son algunos los elegidos, el responsable para la Causa de los Santos en la archidiócesis de Madrid argumenta que los milagros representan “un signo de lo que Dios quiere hacer con todos. Es como si estas personas tuvieran una primicia de la curación definitiva, que es la Resurrección”, ha recalcado.