El obispo de Cartagena, nombrado presidente de la Comisión Episcopal para las Comunicaciones Sociales
Durante la Asamblea Plenaria de la CEE, Mons. Lorca Planes ha sido nombrado para este relevante cargo
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Este lunes hemos conocido uno de los nombramientos que se han producido en la Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española. Se trata de monseñor José Manuel Lorca Planes, obispo de Cartagena, quien ha sido nombrado Presidente de la Comisión Episcopal para las Comunicaciones Sociales.
¿Qué es la Comisión Episcopal para las Comunicaciones Sociales?
La comunicación es parte esencial de la vida del ser humano. Por eso la Iglesia busca el diálogo con los hombres y mujeres de hoy, cumpliendo así su misión evangelizadora de acercarles al encuentro con Cristo.
Expresar en el mundo contemporáneo las verdades de siempre, con un lenguaje que permita advertir su permanente novedad, es lo que persigue la Comisión Episcopal para las Comunicaciones sociales. Una tarea que debe adecuarse a la constante evolución de la comunicación, que avanza con las tecnologías y que han impregnado y condicionado la vida de las personas dentro y fuera de la Iglesia.
Si el primer medio de evangelización es el testimonio de vida cristiana, para sacerdotes, religiosos y laicos el reto permanente es “ser capaces de comunicar el rostro de una Iglesia que es casa de todos”, como apunta el Papa Francisco.
La figura de monseñor José Manuel Lorca Planas
Mons. José Manuel Lorca Planes nació en Espinardo (Murcia), diócesis de Cartagena, el 18 de octubre de 1949. Cursó los estudios medios en el Seminario menor y después los eclesiásticos en el Seminario mayor "San Fulgencio" de Murcia. Es Licenciado en Teología Bíblica por la Facultad de Teología de Granada. Recibió la ordenación sacerdotal en la Parroquia de "San Pedro Apóstol", de Espinardo (Murcia), el 29 de junio de 1975. Fue ordenado Obispo el día 6 de marzo de 2004 en Teruel.
El 18 de julio de 2009 fue nombrado Obispo de Cartagena y tomó posesión el 1 de agosto del mismo año. Forma parte de la Comisión Episcopal de Seminarios y Universidades de la Conferencia Episcopal Española.
Siempre se ha mostrado preocupado por cuestiones como la crisis o el fanatismo. Le cuesta entender que un ser humano mate a otro. También le hacen sufrir tragedias como la hambruna en el cuerno de África, catástrofes como la vivida en su tierra hace unos años con los terremotos de Lorca o, más recientemente, los devastadores efectos de la pandemia. Aunque siempre ha insistido en lo mismo: “La decepción se combate con solidaridad”.
En el estilo y en su vida destaca por su sencillez y cercanía con la gente; él no pone distancias y es feliz escuchando y animando con gran responsabilidad a seguir los pasos de Jesús con ilusión. Esa es su verdadera y principal misión, su tarea y afición. Difícilmente se le ve disgustado con alguien, es positivo y busca la reconciliación y el vuelta a empezar.
Es una persona que está convencida de que el arte y la belleza evangelizan y valora mucho todas las manifestaciones artísticas de cualquier disciplina. Todos conocen su afición a la pintura. Desde joven iba a todas las exposiciones que había en Murcia y en Granada en su época de estudiante. Allí conocía a todos los artistas por sus obras expuestas, aunque en esta época le es difícil seguir esta práctica por sus obligaciones.
Desde joven ha estado enredado entre lápices y pinceles, simplemente porque le gustaba, porque no tiene escuela, es autodidacta. Esta capacidad que Dios le ha dado la pone también al servicio de la evangelización. Cada semana ilustra el evangelio del domingo con imágenes hechas por él y que son difundidas en la web y redes sociales de la Diócesis de Cartagena.
Nació en el corazón de la huerta murciana y disfruta cuando viaja de un pueblo a otro. O en las pedanías, donde a quien le acompaña siempre le pide caminar por los caminos y veredas para ver qué hay plantado, para contemplar los limoneros y los frutales. Él mismo cuida con esmero el patio de su hogar, donde en pequeñas macetas, crecen naranjos, olivos, limoneros, rosales y claveles…, les arranca las malas hierbas y vigila su crecimiento cada día con asombro y alegría.