Así puedes bendecir la mesa de la cena de Navidad
COPE te presenta varias oraciones y fórmulas para bendecir la mesa en Navidad
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Diciembre es un mes importante para todas las familias. El día 25 celebramos el nacimiento de Dios -que no es poca cosa- no solo hace 2.000 años, sino también en nuestra sociedad de hoy. Queremos que Jesús esté presente en nuestra vida, que sea el protagonista de este tiempo de la Navidad. Y las comidas familiares tan importantes que vamos a vivir, son una buena oportunidad para ponerle en el centro.
Bendecir la mesa es una costumbre que hacemos durante todo el año, todos los días, pero el día de Navidad es un gran momento para darle una vuelta más. Existen muchas fórmulas para bendecir la mesa, de hecho prácticamente tantas, como familias que bendicen. Pero el redactor y sacerdote de la Cadena COPE, Jesús Luis Sacristán, recomienda una especial para este tiempo.
La oración para bendecir la mesa de Navidad dice así:
El Niño Jesús que nació en Belén,
bendiga estos alimentos y a nosotros también.
Amén.
Además recomienda que en nuestros hogares pongamos el belén y que esta oración se haga cerca de él. Para tener más presente y recordar que en estos días celebramos la venida del Salvador, que Dios se hizo hombre para estar con nosotros y que también hoy lo quiere así.
Es bueno bendecir la mesa durante todos los días del año. Es, en definitiva, poner a Dios en cada cosa que hacemos, hacer que esté presente en nuestro día a día. "Cualquier alimento es un don de Dios". Bendecir es 'decir bien', dar gracias -en el caso de los alimentos- agradecer a nuestro Padre porque nos haya regalado esa comida.
Otra fórmula para bendecir que puede usarse durante todo el año es la siguiente:
Bendice Señor estos alimentos que vamos a recibir,
da pan a los que tienen hambre, y hambre de ti a los que tenemos pan.
Por Jesucristo Nuestro Señor
Amén.
'Cada maestrillo tiene su librillo' y no hay ninguna regla respecto a la bendición de la mesa. Por eso es bueno también que sea algo personal, dando las gracias y poniendo a Dios en un momento importante, como es la cena de Nochebuena o la comida de Navidad.