Una Iglesia madre amorosa y ejemplarizante ? editorial ECCLESIA

Una Iglesia madre amorosa y ejemplarizante ? editorial ECCLESIA

El Papa firmó el sábado 4 de junio, con inmediata entrada en vigor, la carta apostólica dada como motu proprio ?esto es, con carácter y fuerza de decreto- Come una madre amerevole (Como una madre amorosa. Se trata de un texto pontificio (ver página 33) que refuerza el compromiso de la Iglesia en la lucha y prevención de los abusos sexuales a menores y a adultos vulnerables. Su mayor novedad, con la correspondiente modificación canónica, atañe a las responsabilidades de los obispos y de los ordinarios, que podrán ser cesados si se demuestra un comportamiento negligente u ocultación de información en relación con los referidos y execrables casos de abusos sexuales.

¿Qué pretende Francisco con ello? En absoluto, se trata de extender la sombra de la duda o de la desconfianza. Se trata de una apuesta por la ejemplaridad y por un renovado compromiso de toda la Iglesia, comenzado por sus primeros pastores y responsables, para anteponer los derechos y la dignidad atroz y vilmente vulnerados de los más débiles a cualquier otra consideración. Se trata, en suma, de una nueva medida papal para limpiar y liberar a la Iglesia de una lacra inadmisible.

Y es que la Iglesia ama a todos sus hijos, pero ha de "curar y proteger con un afecto muy particular a los pequeños e indefensos". Y la pederastia ha de ser ejemplarmente erradicada y combatida, caiga quien caiga.