Así es como la Inteligencia Artificial te ayuda a buscar trabajo y salir del paro: En solo 3 meses y a gran escala

A poco menos de dos años desde que OpenAI lanzara su más que conocido ChatGPT, la inteligencia artificial no ha dejado de demostrar todo su potencial. Aunque muchos de sus usos estén enfocados a los avances en tecnología y ciencia, hay herramientas que pueden ser útiles en muchos otros aspectos más habituales en el día a día.

Buscar trabajo es una labor tediosa. Las páginas web y aplicaciones especializadas han hecho que se volviera algo más sencillo este proceso de encuentro entre empresa y candidato, pero sigue siendo algo que hay que saber hacer.

Hay maneras de realizar las búsquedas de manera más eficiente en portales como LinkedIn, pero sigue siendo algo en lo que hay dedicar un tiempo. Tenemos que revisar las ofertas, ver cuál nos interesa más y completar el proceso para solicitar al puesto, que en ocasiones va más allá de dar a un simple botón.

La Ia puede servirnos para que nos "vean con mejores ojos"

Si bien es cierto que en estas plataformas de empleo lo más probable es que ya hayamos incluido información nuestra a modo de currículum, muchas empresas desean recibirlo una vez reciben la alerta de solicitud. 

Así, la inteligencia artificial puede ayudarnos a dar con un currículum que muestre "nuestra mejor versión" o, por lo menos, la versión que más va a llamar la atención de los reclutadores. De esta manera, tendremos más posibilidades de que nos contraten.

Para esto, es tan sencillo como seguir los pasos que indica Sandra Ochoa, directora de recursos humanos y creadora de contenido centrado en consejos para conseguir trabajo:

1. Pedirle a la IA que actúe como un experto en empleabilidad.
2. Pedirle que escriba el currículum adaptado al perfil al que tenemos intención de postular, incluyendo habilidades, competencias y palabras clave.
3. Pedirle que emplee el formato ATS, que no es otra cosa que el software que usan las empresas para filtrar.

El siguiente nivel: solicitudes automáticas

Del mismo modo que hay empresas que utilizan herramientas informáticas para distinguir entre el gran número de candidaturas las que les interesan y las que no, se puede usar la inteligencia artificial para solicitar automáticamente a cientos de empresas.

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En concreto, el experimento que llevó a cabo Jason Koebler, periodista del medio 404 Media, consiguió llevar a cabo 17 solicitudes en una hora. Pero esto no se queda ahí, sino que el programa era capaz de adaptar su manera de contactar a la empresa para aumentar las posibilidades de éxito.

"El camarero me da mi desayuno y yo aparto el portátil mientras el bot cobra vida, abre una ventana de Chrome y navega hasta LinkedIn. Empieza a desplazarse por las ofertas de empleo y abre unas cuantas", narra Koebler.

Explica que en función del sector de la empresa y de sus particularidades, este bot adaptaba su mensaje y su currículum para trasladar los intereses de la persona a la que "representaba".

El nombre del software que estaba utilizando es Auto_Jobs_Applier_AIHawk y, según comenta, "miles de personas lo están utilizando activamente para emplear la IA en la solicitud automática de empleo en LinkedIn a gran escala".

Una de las reflexiones que hace el autor del reportaje tiene que ver con la eliminación del ser humano en el proceso de buscar trabajo, ya que, al final, una inteligencia artificial se encarga de hacer el currículum y la carta de presentación para que otro robot sea el que lo lee y lo filtra.

A LinkedIn estas herramientas no les hacen mucha gracia y, de hecho, ya han vetado al cofundador del programa, Federico Elia, según comenta para 404 Media. La plataforma de empleo cuenta con su propia inteligencia artificial que pretende ayudar a los usuarios, pero no llega a sustituir su participación.

Jason Koebler comenta que en poco menos de una hora llegó a solicitar a 17 puestos de trabajo, pero algunos usuarios han llegado a la cifra de 2.843 solicitudes en cerca de tres meses. Aclara que comete errores y que confiar ciegamente puede llevar a problemas, sin ir más lejos, en el momento de una entrevista personal.