La Bolsa se mueve con pies de plomo pendiente del Banco Santander y del petróleo

Los mercados se toman del día, de momento, con bastante tranquilidad. Los mercados empiezan a creer que la recuperación económica puede comenzar antes de lo que se pensaba. Incluso podría ser algo más intensa de lo estimado inicialmente, siempre que continúe mejorando la situación sanitaria. La Bolsa se frena después de las fuertes ganancias de ayer.

El índice Ibex 35 abre en 6.730 puntos, con una pérdida mínima del 0,1 por ciento. Bajan Telefónica, Repsol y los bancos. El Santander se deja apenas un 1 por ciento. El beneficio de la entidad cántabra se ha reducido un 82 por ciento en el primer trimestre del año, hasta 331 millones de euros, debido a que ha realizado fuertes provisiones por 1.600 millones de euros para hacer frente al deterioro económico derivado de la crisis sanitaria. Sin contabilizar esa partida, el resultado del grupo habría crecido un 1 por ciento hasta 1.980 millones. El impacto del Covid-10 se notará con toda su dureza en el segundo trimestre y siguientes.

Igual sucede en las cifras de paro que se han publicado en España. La EPA ha sido muy negativa, pero serán peores las siguientes, cuando ya se contabilice la hibernación de la actividad económica durante el mes de abril. Hoy los mercados dispondrán también de otras referencias importantes, como la balanza comercial y la confianza del consumidor de Estados Unidos. Para este último indicador, los analistas esperan que caída desde los 120 puntos a una lectura de 95. Más de dos terceras partes de la actividad económica de EEUU depende directamente del consumo privado. Dentro de casa, según JP Morgan, la confianza de los inversores españoles ha caído a plomo en el mes de marzo. Se ha situado en niveles que no se veían desde hace siete años. Además, se esperan datos muy negativos referidos al segundo trimestre.

Vuelve a desplomarse el petróleo

La Comisión Europea estima una contracción de la economía de la eurozona en este año de entre un 5 y un 10 por ciento de pendiendo de lo que dure el confinamiento y el tiempo en que esté congelado el tejido productivo. Bruselas publicará sus previsiones económicas el 7 de mayo. La CE espera movilizar 1,5 billones de euros para enfrentar los efectos económicos de la crisis sanitaria. Peores previsiones maneja el banco estadounidense de inversiones Morgan Stanley, que augura una caída del PIB de España de entre un 6 y un 22 por ciento este año, dependiendo de lo que dure la hibernación de la economía. Espera una recuperación del 7 por ciento en 2021. Por su parte, los expertos de Goldman Sachs estiman el impacto del coronavirus sobre la economía mundial en el 17 por ciento. Esperan que la actividad se recupere en los próximos trimestres.

En los demás mercados, el oro baja hasta 1.715 dólares por onza, mientras vuelve a desplomarse el precio del petróleo. El de tipo West Texas de Estados Unidos, que hace una semana llegó a cotizar en negativo, hoy baja un 13 por ciento, hasta 11 dólares, mientras el barril Brent europeo se abarata un 4 por ciento. Se paga a 22 dólares. Llueve sobre mojado, porque el crudo estadounidense perdió ayer un 26 por ciento, mientras el petróleo europeo del Mar del Norte cayó un 7 por ciento. Con la economía congelada en medio mundo, sobra crudo por todas partes y ya no hay físicamente lugares disponibles para almacenar tantos excedentes.