Acusan al PP de contactar con detectives para espiar al hermano de Ayuso

Tras la cita electoral en Castilla y León, el enfrentamiento político en el seno del Partido Popular, entre Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso, continúa. En este caso por un supuesto encargo, por parte de la dirección nacional del partido, de investigar al hermano de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Tomás Díaz Ayuso, según publica el diario 'El Mundo'.

La investigación, llevada a cabo por un grupo de detectives privados, buscaba conseguir información comprometedora sobre el hermano de Ayuso, ya que desde la directiva del PP sospechan que recibió una comisión por un contrato concedido por la comunidad a un empresario amigo, según apunta 'El Confidencial'.

La adjudicación en sí se llevó a cabo en abril de 2020 para la obtención de mascarillas FFP2 y FFP3, su importe fue de 1,5 millones de euros y fue otorgada a la empresa Priviet Sportive SL, que se dedica a la importación y exportación de prendas textiles. Su administrador, Daniel Alcázar Barranco, reside en Sotillo de la Adrada, el municipio en el que los hermanos Díaz Ayuso veranean desde hace años.

El objetivo de la supuesta investigación tenía como finalidad la obtención de dos documentos clave: por un lado, un extracto de la cuenta bancaria de Tomás Díaz Ayuso, que pudiera probar el cobro de la comisión y, por otro, la declaración de proveedores de Priviet Sportive SL. Ambos para poder probar, de manera inequívoca, que el hermano de la presidenta madrileña había cobrado un porcentaje por la adjudicación del contrato, y utilizarlo en contra de la líder madrileña.

El equipo de Isabel Díaz Ayuso recibió la información el pasado mes de diciembre, por parte de un exministro de Rajoy, en la que apuntaban que un cargo del Ayuntamiento de Madrid, había encargado a una empresa de investigación, la labor de acreditar el posible cobro de comisiones del entorno familiar de la líder del ejecutivo, a cambio de contratos públicos.

Desde 'El Mundo' y 'El Confidencial' señalan que Ángel Carromero, actual director general de la Coordinación del Alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, era el que estaba al mando de la operación. Carromero mantiene una estrecha relación con Teodoro García Egea y Pablo Casado, con este último reforzó su amistad en 2018, cuando se celebraron las primarias en el PP para elegir al sustituto de Mariano Rajoy. En dicho momento, Carromero se movilizó de manera notable para apoyar a Casado y terminó jugando un papel clave en la victoria de este.

Cuando la información de la investigación llegó a la Comunidad de Madrid, el Ayuntamiento de la capital decidió abrir una investigación interna para averiguar la realidad de los hechos. En esta tuvieron lugar careos entre funcionarios de la Empresa Municipal de la Vivienda, y la conclusión, hasta la fecha, es que no se llevó a cabo el encargo al grupo de detectives privados, y que no se utilizó dinero público para dicha cuestión.

En este sentido, según ha relatado el colaborador de 'Herrera en COPE', Jorge Bustos, "se le encargó a un detective una información que no se puede extraer sin orden judicial, es decir casi cometer un delito" con lo que ese detective "se negó y se puso en contacto con el gobierno de la Comundad de Madrid para contar el encargo que había recibido".

Desde el círculo de García Egea se solicitó presupuesto a una agencia de investigación para buscar las pruebas contra Tomás Díaz Ayuso, pero el alto precio del trabajo y la dificultad de financiación del mismo sin levantar sospechas, llevó al equipo a desechar la opción, según explica 'El Confidencial'.

Tras salir a la luz la información en torno al posible espionaje, el PP de Madrid ha emitido un comunicado desmintiendo "tajantemente las informaciones publicadas en relación a una supuesta investigación sobre los contratos sanitarios adjudicados por la Comunidad de Madrid" y ha anunciado que "tomará las medidas judiciales oportunas ante estas falsedades".

Desde la Puerta del Sol aseguran a COPE que dan veracidad a esta información.