Pedro Duque y Màxim Huerta no son los primeros 'outsiders' de la política
En España Toni Cantó, 'Felisuco' o Marta Domínguez demuestran que la política llega a todos los ámbitos. En el resto del mundo, los casos de Donald Trump, Ronald Reagan o George Weah lo confirman
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Si hace un mes a un ciudadano español le dicen que en 30 días el PSOE va a gobernar el país le hubiera costado créerselo. Si, además, le dicen que Pedro Duque y Màxim Huerta van a ser ministros, no habría dado crédito. A la velocidad del cambio de ejecutivo, se añade el sorprendente nombramiento de dos 'outsiders' de la política: un astronauta y un escritor y periodista más cercano en su trayectoria a la crónica social que a los temas de portada de los periódicos.
Pero Duque y Huerta no son elementos peculiares nuevos en la política. Ni en España ni en el resto del mundo. En nuestro país, por ejemplo, han sido ministros de Cultura una directora de cine como Ángeles González-Sinde (2009-2011) y un escritor reputado como César Antonio Molina (2007-2009). Ambos con el socialista José Luis Rodríguez Zapatero en la presidencia.
Tampoco el PSOE es el único partido que ha contado con este tipo de perfiles entre sus filas. En Ciudadanos encontramos a dos actores-diputados: Toni Cantó (que antes ya pasó por Unión Progreso y Democracia) y Félix Álvarez 'Felisuco'.
Por su parte, el Partido Popular es más de deportistas, como la exatleta Marta Domínguez, concejala en Palencia a principios de los 2000 y senadora entre 2011 y 2015. Este deporte, el atletismo, parece vinculado al PP: Ruth Beitia es diputada en Cantabria, Abel Antón senador, y José Ángel García Bragado diputado provincial en Barcelona. La hispano-cubana Niurka Montalvo se ocupó de la Secretaría Autonómica del Deporte con Francisco Camps en el poder en la Comunidad Valenciana. Además, una de las mejores deportistas de la historia del olimpismo español, la judoca Isabel Fernández, fue concejala popular en Alicante.
También el 'procés' tiene estos perfiles, más allá de la implicación de Pep Guardiola. El actor Juanjo Puigcorbé es concejal de Esquerra Republicana de Catalunya en Barcelona. Y eso que dio vida a Juan Carlos I en la tv movie Felipe y Letizia.
¿Y en el resto del mundo?
Más allá de nuestras fronteras encontramos un caso similar al de Pedro Duque: el ministro de Transporte canadiense, Mark Garneau, es también astronauta.
Aparte de esta curiosidad, no hace falta romperse demasiado la cabeza para encontrar al famoso político más famoso del mundo: Donald Trump. Magnate multimillonario célebre en Estados Unidos y en medio mundo antes de entrar en política, el ahora presidente de la primera potencia mundial fue propietario de los concursos Miss Universo y tuvo su propio reality-show en la cadena de televisión NBC.
Antes que él, también en este país, un actor llegó a la Casa Blanca: Ronald Reagan fue presidente entre 1980 y 1988. Ya en 1966 fue elegido gobernador del estado de California, como años más tarde lo sería el también intérprete Arnold Schwarzenegger. Terminator estuvo al frente de esta región entre 2003 y 2011. Tanto él como Reagan son del Partido Republicano. Como Trump.
En Brasil, el cantante, guitarrista y compositor Gilberto Gil fue ministro de Cultura con Lula da Silva de 2003 a 2008. En Italia -otro país donde espectáculo y política se confunden bastante-, Silvio Berlusconi fue antes gran empresario (fundador de Mediaset) que primer ministro, mientras que el cómico Beppe Grillo intentó canalizar la indignación hacia las corruptelas transalpinas fundando y liderando el Movimiento 5 Estrellas que ya ha abandonado.
Futbolistas políticos
Este repaso no puede terminar sin recordar a dos grandes delanteros de los años 90. Romário deslumbró con Barcelona y Valencia en la liga española y ahora, el brasileño es senador en su país, donde ha sido un ariete con la gestión de Joseph Blatter al frente de la FIFA.
Pero si un futbolista ha llegado alto en política, ese es George Weah. El delantero del Milan de los 90 fue el primer africano en ganar el Balón de Oro como mejor jugador del mundo, fue en 1995. Ahora, también es el primer futbolista que ha llegado a presidir su país, Liberia. No ha sido un camino fácil para él, que lo intentó ya en 2005 y perdió. Después, una ley le obligó a tener estudios superiores para volver a postularse. Weah se cursó y terminó Administración de Empresas y Criminología en EEUU y en 2017 fue elegido presidente del país.