La muerte que China quiso ocultar: Li Wenliang, el médico que descubrió el covid y fue silenciado
El doctor chino Li Wenliang fue el primer médico que alertó sobre el peligro del coronavirus. Falleció en febrero del año 2020 tras contagiarse de la enfermedad
Madrid - Publicado el - Actualizado
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El doctor chino Li Wenliang fue el primer médico que alertó sobre el peligro del coronavirus. Falleció en febrero del año 2020 tras contagiarse de la enfermedad de la que trató de advertir al Gobierno. No obstante, las autoridades le acusaron de difundir "rumores falsos".
Fue a finales de diciembre del año 2019 cuando el oftalmólogo Li Wenliang alertó a varios compañeros que había comenzado a detectar una enfermedad respiratoria. Varios días después, la Policía china se presentó en su domicilio para reprenderle por el daño que estaban causando sus comentarios, que a su juicio estaban alterando el orden social del país.
Su padre, no obstante, quiso defenderle y utilizó todos los medios de comunicación que pudo. De hecho, aseguró a la BBC que "no creo que haya estado difundiendo rumores. ¿No se ha convertido esto en realidad ahora?", dijo su progenitor, Li Shuying. "Mi hijo era maravilloso", apuntó.
¿Qué le pasó a Li Wenliang?
Fue en diciembre del año 2019, mientras trabajaba en el epicentro del brote en la ciudad de Wuhan, cuando el doctor comenzó a detectar casos de un virus similar al SARS, que años antes ya había provocado una epidemia. De hecho, aquellos enfermos fueron puestos en cuarentena en su hospital. Como ya hemos comentado, a finales de diciembre del año 2019 envió un mensaje a sus compañeros advirtiendo del brote.
De hecho, ya por aquel entonces ya les pidió que utilizaran ropa especial para evitar contagiarse del mismo. No había información y cualquier estrategia para sortear el contagio sería poca. Ni él ni nadie sabía lo que estaba a punto de llegar y, desde luego, aún menos que el SARS que se había comenzado a detectar era completamente nuevo.
Cuatro días más tarde, después de enviar los mensajes a sus compañeros, varios funcionarios de la Oficina de Seguridad Pública le pidieron que firmara una misiva, en la que tenía que confirmar que estaba haciendo "comentarios falsos".
"Le advertimos solemnemente: si sigue siendo terco e impertinente, y continúa con esta actividad ilegal, será llevado ante la Justicia. ¿Se entiende?", fueron las palabras que el médico chino se vio obligado a acepar.
No obstante, él no sería el único que fue investigado por la policía por alertar a las autoridades, compañeros y a la sociedad general de lo que estaba por venir. Sería a finales del año 2020 cuando Li Wenliang publicó una nueva carta, explicando realmente lo que había ocurrido.
Las autoridades de la ciudad de Wuhan procedieron a disculparse, pero ya era demasiado tarde. No había instrucciones, medios, protocolos y tampoco ningún tipo de información. Los sanitarios estaban frente al peligro. Tras varias semanas de incertidumbre, el doctor anunció que había contraído el virus. Una situación de la que no pudo salir y China trató de ocultar su muerte.
Aún a día de hoy existen muchas dudas sobre cuándo falleció realmente el doctor. Las autoridades sanitarias chinas confirmaron que fue de la madrugada del 6 al 7 de febrero. Hubo medios de comunicación del país que publicaron que había fallecido el 6. El hospital, no obstante, confirmó que se encontraba en una situación "crítica" y estaban haciendo "todo lo posible para reanimarle". Los medios tuvieron que retractarse hasta que horas después, el hospital confirmó la muerte.
"En la lucha contra la epidemia de la neumonía del nuevo coronavirus, el oftalmólogo de nuestro hospital, Li Wenliang, desafortunadamente resultó infectado. Li murió pese a todos los esfuerzos para reanimarlo. Lamentamos profundamente su fallecimiento", fueron las palabras con las que el hospital anunciaba la muerte del médico.
La muerte de Li Wenliang desató una ola de indignación en el país y muchos ciudadanos acusaron al Gobierno de tratar de restar importancia de aquella enfermedad, además de cargar duramente contra la libertad de expresión dentro de las fronteras chinas.