Un potente terremoto con 150 réplicas sacude México sin víctimas ni daños graves
Tres personas han muerto al desplomarse el helicóptero en el que el viajaba el Ministro de Gobernación que se dirigía al estado de Oaxaca.
Madrid - Publicado el - Actualizado
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La cadena Televisa informa de que un helicóptero de la Fuerza Aérea que transportaba al secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete, y al gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, cayó a tierra en Oaxaca. El accidente ocurrió cuando faltaban unos 30 o 40 metros para aterrizar en Pinotepa Nacional cuando el aparato perdió el control y se precipitó a tierra para volcar después, declaró Navarrete a la televisión.
El ministro confirmó que lamentablemente "hay gente que ha perdido la vida", todas ellas en tierra durante el aterrizaje de la aeronave, que se dirigía la zona de Oaxaca más afectada por el terremoto que sacudió el centro y el sur de México. La Secretaría de Gobernación indicó a través de la red Twitter que "desafortunadamente dos personas que se encontraban en tierra perdieron la vida en este incidente".
Por la misma vía, el presidente Enrique Peña Nieto precisó que el secretario Navarrete, el gobernador Murat y la tripulación se encuentran bien. "Lamentablemente, varias personas en tierra perdieron la vida y otras resultaron heridas. Mis condolencias para sus familiares y mis deseos de pronta recuperación a los lesionados", añadió.
Si bien oficialmente se ha confirmado la muerte de dos personas, el periodista Jorge Morales, corresponsal de Televisa, quien viajaba en el aparato y resultó ileso, dijo haber visto al menos tres víctimas mortales del accidente.
150 réplicas en todo el centro y sur del país
Un potente terremoto de magnitud 7,2, seguido por un mínimo de 150 réplicas, ha sacudido el centro y el sur de México sin causar daños mayores ni víctimas, aunque una población presa del pánico ha inundado las calles prevenida por la alerta sísmica. Advertidas con 72 segundos de antelación por la alerta que sonó en calles, emisoras de radio y móviles, miles de personas detuvieron sus actividades y salieron a las calles de la capital, sobrecogidas por el miedo aunque con un respeto general al protocolo de emergencia.
El tránsito de vehículos se paralizó durante los sesenta segundos de duración del movimiento telúrico y en las calles se observaban personas con teléfonos móviles para llamar a sus familias y subir fotos y vídeos que saturaron las redes sociales. El terremoto ocurrió a las 17.39 horas (23.39 GMT) con magnitud de 7,2 y fue seguido por 150 réplicas hasta las 20.30 hora local (02.30 GMT del sábado), todas con epicentro en la zona cercana a Pinotepa Nacional, en el sureño estado de Guerrero, según el Servicio Sismológico Nacional (SSN). "Me ha venido un recuerdo muy fuerte de (los terremotos de) septiembre. Estaba muy mareado y espantado pero, pues, ya todo tranquilo. Hemos esperado a que pasara el movimiento y nos han evacuado luego por las escaleras", señaló Gabriel Fernández, de 37 años, que estaba en el undécimo piso de un edificio de Ciudad de México.
David Llanos, de 38 años, ha dicho a los medios locales que se encontraba en la planta baja cuando comenzó el terremoto y que al salir a la calle vio que temblaba "muy fuerte" y lo primero que hizo fue llamar a su casa para verificar que toda su familia estuviera bien. "Tratamos de salir a tiempo por las salidas de emergencia, los compañeros estuvieron pendientes", dijo Ángel Venegas al explicar que, pese al temor, el edificio donde trabaja fue desalojado conforme a los protocolos de seguridad establecidos. La fachada de un edificio y una valla caídas fueron los daños más notorios en Ciudad de México y autoridades federales se han trasladado a las costas del estado sureño de Oaxaca para hacer una evaluación de la situación cerca del epicentro.
El Jefe de Gobierno de Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, ha dicho que se evaluarán y revisarán todas las situaciones pero que de momento no había noticias de afectaciones mayores, tampoco en las construcciones que estaban dañadas por los seísmos de septiembre. En Oaxaca, uno de los estados más afectados por aquellos terremotos, el de hoy provocó escenas de pánico entre pobladores de zonas como Juchitán y Playa Vicente, indicaron testigos. "En Juchitán se sintió muy fuerte, hubo pánico entre la población, que optó por salir de sus viviendas ante la memoria que les dejó el terremoto de septiembre pasado. Todo se observa con normalidad, y no hay señas de daños a primera vista", ha comentado un habitante de la localidad.
En el estado de Guerrero no se ha informado de daños y en el puerto de Acapulco, el principal centro turístico del Pacífico mexicano, hubo un desalojo preventivo de hoteles, así como de plazas comerciales y edificios públicos. En Jalisco el movimiento telúrico fue percibido en la costa y el sur de ese estado del oeste mexicano además de en la zona metropolitana de Guadalajara, su capital, sin dejar daños ni víctimas, informaron fuentes estatales de Protección Civil. Los gobiernos de los estados sacudidos por el terremoto activaron todas las medidas de emergencia y el Comité Nacional de Emergencias se reunió en el Centro Nacional de Desastres para darle seguimiento a la situación. El secretario (ministro) de Gobernación, Alfonso Navarrete, se trasladó de inmediato a la zona del epicentro con la finalidad de evaluar la situación en esa región.
Este terremoto hizo que los mexicanos revivieran las escenas de construcciones derruidas y personas sepultadas por los seísmos de septiembre de 2017, que dejaron un total de 471 víctimas mortales en los estados de México, Oaxaca, Guerrero, Chiapas, Morelos, Puebla y en la capital mexicana.