China recurre a sus 'cazadores de nubes' para afrontar una sequía insólita: Así lo consiguen

China, para hacer frente a la sequía que está afectando al centro del país, ha tomado la decisión de comenzar a aumentar el uso de las lluvias artificiales, tal y como han informado este jueves los medios locales.

El ministerio de Recursos Hídricos ha alertado de que la sequía en toda cuenca del río Yangtze está "afectando negativamente la seguridad del agua potable", la cual es muy importante para la población rural, el ganado y el crecimiento de los cultivos.

Esta sequía insólita en el centro de este país asiático, que viene acompañada de una ola de calor inaudita, ha provocado que se suspenda la actividad en numerosas fábricas debido al aumento de la demanda energética, dado que la producción no es capaz de asumirla, amenazando de esta forma a que haya cortes de luz en varias zonas residenciales.

CAZADORES DE NUBES

Para solucionar este problema, los departamentos meteorológicos de las provincias Hubei y Hunan están usando "cazadores de nubes" para provocar las lluvias, que lanzan unos cohetes que vierten sustancias condensadoras para acelerar las lluvias, como el yoduro de plata.

Según la jefa de oficina de meteorología del condado de Taoyuan, Yu Xiaoyao, aumentar de manera artificial la lluvia "no es fácil", si bien estan "listos desde el 19 de julio para disparar el cañón llegado el momento" afirmó al diario Hunan Daily.

NUBES GRUESAS

Entre las complicaciones está el hecho de que las nubes deben de tener "un grosor de 2 a 3 kilómetros". Además, el condado de Taoyuan comenzó a experimentar a finales de julio altas temperaturas de hasta 41 grados centígrados. Y en las últimas dos semanas las lluvias acumuladas fueron de 3,3 milímetros. Lo que equivale a una disminución interanual de 82, 6 milímetros.

Atrapanieblas chileno

La búsqueda por diferentes métodos de la lluvia no es nada nuevo. Si viajas con frecuencia a Chile, sabrás que el desierto de Atacama es reconocido como el lugar no polar más árido de la Tierra. Y destaca por las escasas precipitaciones en el lugar. De hecho, ha habido veces que el intervalo de tiempo entre una lluvia y otra en el lugar han sido de 40 años. Sin embargo, en las zonas próximas al Pacífico de este mismo desierto, se caracterizan por tener grandes masas de aire húmedo que dan lugar nieblas abundantes. Es por ello que debido a la escasez de agua en ese desierto, varios investigadores decidieron en la década de 1960 encontrar la forma de obtener el agua de estas nieblas para poder aprovecharla. Fue así que el físico Carlos Espinosa inventó lo que hoy es conocido como el primer atrapanieblas, ganándose así el título de "El profesor que atrapó las nubes".

¿Cómo funcionan? Las partículas quedan retenidas en unos paneles con forma de malla con una luz determinada por donde el agua es filtrada. Normalmente, estos paneles son instalados en sitios elevados, a unos 300 u 800 metros por encima del nivel del mar, concretamente por donde más corre el viento. Las pequeñas gotas se quedan en los paneles, se concentran hasta alcanzar un tamaño lo bastante grande como para formar gotas de agua. Estas caen por efecto de la gravedad y se recogen en unos recolectores que se encuentran justo debajo de los paneles.