Cristina Fernández, presentadora de TVE, revela su drama personal al ver la fiesta de Sol: "Fue hace 3 meses"

La presentadora de Televisión Española, Cristina Fernández, ha compartido en su perfil en redes sociales el duro episodio que vivió “hace tres meses” a cuenta del coronavirus. Todo ello en respuestas a las imágenes que se pudieron ver la pasada noche frente a la Puerta del Sol, donde centenares de jóvenes se dieron cita para celebrar a modo de botellón el fin del estado de alarma y, con ello, el final del toque de queda en la Comunidad de Madrid.

Y es que la periodista ya anunció a través de su perfil en Twitter el pasado mes de febrero que su madre había muerto por Covid en un sentido mensaje: “Con el corazón roto, quiero dar las gracias al personal de Zendal por su entrega y cariño con mi madre. El milagro que buscamos no pudo ser. Y eso que luchaste tanto, mamá...gracias por elegirnos. Seguimos sin ti y contigo”. No obstante, ahora la periodista se ha lanzado a la misma red sociales para detallar cómo fueron esos momentos tan difíciles.

Cristina Fernández: “Nos habéis destrozado”

Este domingo los seguidores de la compañera de Mónica López se quedaban sorprendidos con la publicación que dejaba en Twitter: “Mi hermano y yo nos tuvimos que poner un EPI para poder coger la mano de mi madre por última vez”, comentaba la periodista sobre la muerte de su madre.

“No pudimos abrazarla. Fue hace tres meses. Desde entonces, nos hemos alegrado de cada vacuna. De cada día con menos fallecidos”, relataba en las mismas líneas. En ese momento enlazaba su propio drama personal con las imágenes de la polémica: los jóvenes agolpados en la Puerta del Sol. “Esta madrugada, queridos, nos habéis destrozado”, finalizaba la periodista, muy afectada.

Sus propios seguidores le mandaban mensajes de ánimo y le daban la razón en la polémica: "Cristina, hay mucha gente que se piensa que esto ha terminado. Yo la verdad estoy orgullosa, de que aquí en la comunidad valenciana, tengamos aún toque de queda. Ya vendrán tiempos mejores, ahora toca prevenir mucho aún. Mucho ánimo y fuerza para llevar la falta de tu madre", le escribía una usuaria.

Fiestas en Madrid y en el resto de España

Palabras como “subnormales” o “UCIs” eran tendencia este domingo después de que el final del estado de alarma en nuestro país provocara un aluvión de salidas de jóvenes a la calle que decidieron festejar que ya no había toque de queda en su comunidad. Y lo hacían sin mascarilla, agolpados, cantando, incluso quemando contenedores y destrozando mobiliario urbano.

La primera noche sin estado de alarma ni toque de queda -salvo en Baleares y Comunidad Valenciana- fue una multitudinaria fiesta improvisada protagonizada principalmente por jóvenes que querían festejar así el fin de meses de restricciones que les habían llevado al cansancio y al hartazgo por no poder juntarse por las noches.

Eso sí, en la mayoría de ciudades no hubo que lamentar incidentes graves ni intervenciones de la policía más allá de las habituales en una situación como esta. Anoche no hubo espacio para el silencio ni las mascarillas y sí para el alcohol, la música a tope en plazas y parques, los bailes, los cohetes, los petardos y los abrazos entre los participantes.