Frank Cuesta en peligro por "la serpiente venenosa más grande del mundo": "¡Que te matan!"
Frank Cuesta se enfrentó a King Cobra de unos cuatro metros, muy agresiva y "con el veneno más potente"
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Frank Cuesta es uno de los personajes más polémicos que ha habido en nuestra televsión. Además de por mojarse a la hora de dar su opinión sobre la actualidad y aclarar su ideología política, también suele dar mucho que hablar por su llamativas apariciones en pantalla. Esta vez, lo que ha llamado la atención es el vídeo que ha publicado desde su canal de YouTube, en el que suele mostrar como rescata animales para dejarlos en libertad o como les salva la vida para evitar que sean matados por los humanos.
En este episodio, Cuesta recibe la llamada de un hombre que se ha encontrado una serpiente de gran tamaño en su cobertizo. Como es habitual, el herpetólogo se trasladó hasta la vivienda para sacar de allí al animal y liberarlo en plena naturaleza para alejarlo lo más posible de los ciudadanos.
Nada más llegar, con la idea de llamar la atención de la serpiente, el comunicador comenzó a hacer ruido con su vara de control, a mover objetos y peinar el lugar. Finalmente, tras unos minutos de búsquerda, el ex tenista encontró al reptil escondido encuentra entre varios objetos y barreños.
Nada más verla, Cuesta se quedó muy sorprendido al darse cuenta de que se trataba de una King Cobra, "la serpiente venenosa más grande del mundo y con el veneno más potente". A pesar de ello, él quería cumplir su objetivo y comenzó a cogerla de la cola, mientras intentaba controlar su rostro con la vara y así poder sacarla a campo abierto y meterla en una cesta.
"Con lo bueno que era yo antes"
Sin embargo, resultaba ser una tarea bastante complicada al tratarse de una serpiente de gran tamaño y con mucha agresividad, dado que intentó morder al herpetólogo en varias ocasiones. "A ver como hago para meter esta serpiente en una bolsa", se planteaba el comunicador, cayendo en que la mejor opción era seguir para "cansarla" y que le costase más huir de él.
"A ver cómo te saco de aquí… Sé que tú no me quieres hacer daño", se le escucha decir a Cuesta al reptil. "Ya sé que vives por aquí cerca, pero si no te saco, te van a matar", agregaba, dejando claro el motivo por el que quería atraparla y que no quería hacerle daño. "¡Que te matan! ¡Es una brutalidad!", exclamaba al ver que la serpiente seguía esforzándose por escapar.
"No es fácil es hacer esto solo, como no tengas una experiencia muy grande acabas en un agujero", aclara el condcutor del espacio, haciendo referencia a la peligrosidad de esta especie. Asimismo, reconoce que el paso de los años le ha afectado físicamente y ya no tiene ni la fuerza ni los reflejos que tenía antes. "Con lo bueno que era yo antes", se lamentaba.
Finalmente, tras varios intentos fallidos, Cuesta logró meter a la serpiente en una bolsa que había fabricado él mismo con una sabana. Después, consiguió meterla en una cesta, dado que le podía morder a través de la tela. Posteriormente, después de un breve trayecto hasta una zona de naturaleza, el herpetólogo pudo liberarla y alejarla de los peligros del ser humano.