Detalles de Juan Ortega y voluntad de Cayetano en la tercera del Corpus

Gran cartel del gusto del aficionado pero luego no fue nadie. Un cuarto de plaza. En Granada hay que pensar fórmulas distintas.

Son carteles que apuntan sobre el papel pero que no disparan la afluencia en los tendidos. Algo así le pasó a la tarde. Muchos preciosos detalles pero nada más. Muchas chispas pero el fuego no se acabó de encender. Eso sí, los fotógrafos se hincharon. Más tarde de "reels" que de crónicas.

El primer toro fue un animal de mucha transmisión e importancia. Tenía un pitón izquierdo muy complicado. Por ese lado, en todo momento sabía lo que se dejaba atrás. Acabó levantando del suelo a Cayetano sin aparentes consecuencias. El torero estuvo aseado y tras una estocada delantera cortó la primera oreja de la tarde.

El cuarto fue otro toro de opciones. Hizo bien las cosas en los primeros tercios y después tuvo movilidad y ritmo en la muleta. Brindó la faena a su hijo, y a los sones de Nerva, Cayetano empezó a correr la mano. Intentó lucirlo pero quizás faltó algo de ajuste. Lo mejor, dos cambios de mano de bella factura. Se tiró muy recto a matar, tanto que incluso quedó la espada algo contraria.

El segundo de la tarde fue un toro que acusó falta de empuje. En la muleta tuvo escaso recorrido y embestía a gañafones. Juan Ortega tampoco le ayudó para que cambiara su comportamiento. Raro fue el muletazo en el que no le enganchó. El trasteo quedó en nada. Le dieron una oreja de rebajas.

Lo mejor de la tarde llegaría en el saludo capotero del quinto, por verónicas y por delantales. Mostró su sello más personal. Esa forma de coger el capote y de echárselo al animal es inconfundible. El toro sin ser un portento, se dejó. Con la muleta Ortega se desmayó en cada uno de los muletazos pero no acabó de redondear nada. Todo fueron preciosos detalles. Preciosos, pero detalles. Estocada en la yema pero el toro tardó en caer. Por eso, solo pudo cortar una oreja.

Pablo Aguado tuvo el peor lote de la tarde. Su primero empujó en varas y se llevó un extraordinario quite de verónicas. En la muleta el toro fue muy desentendido. Ni humilló ni se empleó. Aguado alargó el trasteo en vano. Después le recetó un bajonazo.

Tampoco sirvió el sexto de la tarde, de embestidas inciertas. El torero puso voluntad y tras otra estocada baja, cortó una oreja.

Granada, sábado 10 de junio de 2023. 3ª de Feria. Un cuarto de plaza.

Toros de

, bien presentados y de juego desigual. Tuvieron opciones el primero, el cuarto y el quinto.

Cayetano Rivera, oreja y dos orejas.

Juan Ortega, oreja y oreja tras aviso.

Pablo Aguado, silencio tras aviso y oreja.

ENFERMERÍA: Cayetano fue asistido de un "varetazo en gemelo y hueco poplíteo izquierdo y otro en la tibia derecha, que no le impiden continuar la lidia".