El Gran Canaria sale de la cuarentena con victoria; Joventut gana por primera vez fuera de casa

Herbalife Gran Canaria, 94 - Nanterre 92, 82

El Herbalife Gran Canaria sale de su particular 'cuarentena' con un triunfo balsámico en la Eurocopa, el segundo en la competición continental, esta vez ante un aguerrido Nanterre 92 que le apretó las tuercas desde el perímetro, pero que terminó diluyéndose en la segunda parte gracias a su arsenal ofensivo (94-82).

El interior estadounidense Matt Costello, con 14 puntos y 11 rebotes (27 de valoración), se erigió en el referente en la pintura amarilla a pesar de saltar al parqué como suplente, en una escuadra en el que hasta seis jugadores superaron la decena de puntos.

Una nueva parada táctica solicitada por Fisac propició la entrada del canterano Jean Montero como director de orquesta. Junto al dominicano emergió nuevamente Dimsa, dando un nuevo golpe de timón en el electrónico (56-58), aunque aún era insuficiente ante las acometidas de Conklin y Warren, que ponían tierra de por medio una vez más (56-62 en el minuto 29).

Sin embargo, en el último cuarto John Shurna capitalizó la artillería amarilla junto con Costello y el Herbalife terminó pasando el rodillo para sellar su segundo triunfo en la competición europea (94-82).

Bourg, 77 - Joventut, 84

El Joventut ganó 77-84 ante el Bourg en Bresse francés su primer partido como visitante desde su retorno a las competiciones europeas en un choque en el que Ante Tomic (18 puntos) y Pau Ribas (16 puntos) fueron decisivos

Pese al triunfo, los verdinegros sufrieron más de la cuenta para asegurar el triunfo al no saber jugar con una ventaja de 21 puntos (51-72), dejar que los franceses se metieran en el partido con su juego veloz y encajar 26 en un último cuarto para olvidar.

Los triples de Ribas y la asociación entre Dimitrijevic y Morgan llevaron a los verdinegros a una máxima ventaja de 18 puntos al final del cuarto (51-69) y la ampliaron hasta los 21 tras un triple de Morgan en el primer ataque del ultimo cuarto (51-72).

No supo leer el partido la Penya cuando parecía resuelot y se olvidó de todo el trabajo anterior, viéndose solo cuatro puntos arriba (75-79) a minuto y medio del final. Tomic y Ribas acudieron al rescate del equipo para evitar males mayores.