UD Almería: Salva su primera final y sigue mirando al ascenso directo (1-0)

Aunque queden todavía nueve jornadas más, lo vivido en la noche del sábado en el UD Almería Stadium era lo más parecido a una final. Sobre todo para el conjunto almeriense en su idea de lograr el ascenso de manera directa. Con una victoria en las últimas 10 jornadas, el plantel de Rubi se había colocado a ocho puntos de la zona más privilegiada, que eran nueve con relación al Levante, su rival en esta cita. Así que un traspié podría considerarse como el 'adiós' a esta posibilidad y pensar solamente en lograr subir a Primera vía playoff. En cuanto a los granotas, se notaba también que el cuadro valenciano estaba ante una oportunidad de descartar, para la lucha de las dos primeras plazas, a la plantilla más cara de toda la competición y, en teoría, el máximo favorito al ascenso. 

El miedo a no perder se apoderó, en parte, a la alegría por ganar. En una primera mitad en la que las ocasiones brillaron por su ausencia. Eso sí, las hubo. Una parada de Luis Maximiano evitó la más clara del Levante. En el otro área, los de Rubi mostraban una clara falta de acierto en el remate. Marc Pubill, Radovanovic, Nico Melamed o Gonzalo Melero las tuvieron sin puntería.

MÁS IGUALADO. MÁS OCASIONES

Tras la reanudación, el partido se abrió algo más. El Almería ya lograba que Andrés Fernández tuviera más trabajo. Sobre todo en una acción individual de Luis Suárez que el colombiano no pudo culminar por una buena parada del cancerbero visitante. 

Por su parte, Carlos Álvarez lograba escaparse en un par de ocasiones del férreo marcaje de Bruno Langa y permitió que el Levante tuviera los mejores acercamientos a un Luis Maximiano que, en esta ocasión, sí fue clave para mantener su puerta a cero.

Con tanta igualdad, el balón parado fue clave. Bueno, más bien, el VAR. Un córner favorable al Almería acabó con Luis Suárez y Marc Pubill en el suelo por sendos agarrones. La jugada siguió hasta que el colegiado Mallo Fernández tuvo que pararla a instancias de la Sala VOR. Allí, Arcediano Monescillo le dijo que fuera al monitor para valorar el agarrón a Marc Pubill por parte de Ignasi Miquel. Lo vio y lo señaló.

Podría parecer una alegría para los rojiblancos, pero al que más y al que menos se le vino a la cabeza otra situación similar. Cuando con 0-0 se le señaló, tras aviso del VAR, una pena máxima a su favor en la portería del fondo Norte. Con Luis Suárez como ejecutor. El colombiano, en esa ocasión, lo mandó al larguero y el Almería no ganó.

Todo lo contrario que en esta ocasión. Lanzó por bajo engañando a Andrés Fernández. Para el despertar de la afición rojiblanca que veía, de nuevo, que el Almería tiene opciones de ascenso directo y que se había salvado esta primera final. Algo que se corroboró en el último minuto, cuando Espí remató de cabeza y se fue fuera por poco, en lo que podría haber sido un empate para el líder, pero que no premió al equipo que más goles marca en los últimos minutos. En esta ocasión no fue así. 

El Almería ganó y todo se aprieta en la parte alta. Los de Rubi no están descartados para la gloria.