Un repartidor de comida de Cádiz revela cuándo se pueden quedar el pedido: "Entre siete y 10 minutos"

En un reciente vídeo viral en TikTok, un repartidor de comida de Cádiz, conocido como Álex, ha desvelado una práctica común entre los repartidores de las principales plataformas de reparto a domicilio, como Glovo y Uber Eats. Según su relato, hay un tiempo límite tras el cual los repartidores pueden quedarse con los pedidos que no logran entregar. Este tiempo varía dependiendo de la plataforma, siendo de siete minutos en Uber Eats y diez en Glovo. La revelación ha causado gran expectación y ha puesto sobre la mesa un tema poco conocido por los consumidores.

Álex, que trabaja con las empresas más conocidas de reparto en la ciudad andaluza, explica que el problema suele surgir cuando los repartidores no logran contactar con el cliente o cuando la dirección proporcionada es incorrecta. En estos casos, los repartidores activan un cronómetro, que marca el tiempo que tienen para intentar contactar con el cliente antes de que el pedido sea considerado "libre" y puedan disponer de él.

Según Álex, cuando un repartidor no puede contactar al cliente tras intentar varias veces, activa el contador. En el caso de Glovo, el tiempo es de diez minutos, mientras que en Uber Eats el plazo es algo más corto, de siete minutos. Durante este tiempo, el repartidor sigue intentando ponerse en contacto con el cliente. Álex recomienda estar atento a las llamadas, ya que si el cliente recibe una llamada desde Barcelona, lo más probable es que se trate de la centralita de Glovo intentando hacer contacto.

"En esos 10 minutos, si no recibimos respuesta, el pedido queda libre", explica Álex. Esto significa que el repartidor puede dejar el pedido en la calle, regalarlo a alguien o incluso quedárselo, dependiendo de las circunstancias. En el caso de Uber Eats, el repartidor debe tomar una foto del pedido dejado en la vía pública para cumplir con las políticas de la plataforma.

¿Qué hacer para evitarlo?

El consejo principal que ofrece Álex es muy claro: estar atento. Los usuarios deben asegurarse de que su dirección esté correctamente ingresada en la aplicación y responder rápidamente si el repartidor intenta ponerse en contacto. "He llegado a tener que cancelar pedidos de 70, 80, 90 y hasta 100 euros", comenta Álex, haciendo hincapié en la importancia de evitar la pérdida del pedido y la frustración tanto para el repartidor como para el cliente.

Álex también aprovecha para recordar que, aunque las plataformas de reparto intenten contactar en repetidas ocasiones, si el cliente no responde y se supera el tiempo establecido, el pedido será liberado. En este caso, los repartidores pueden tener que gestionar el pedido de la manera más conveniente para ellos.

Este tipo de información es vital para los usuarios que piden comida a domicilio con frecuencia, ya que puede marcar la diferencia entre recibir su pedido a tiempo o ver cómo este es cancelado y dejado en la calle. Es esencial ser conscientes de cómo funciona el sistema de reparto y estar disponibles para evitar que el pedido quede "libre" y acabe en manos del repartidor.

Álex concluye su vídeo con un consejo crucial: "Si ves que te llaman y no reconoces el número, contesta, porque puede ser la central de la plataforma intentando contactar contigo". Este sencillo gesto puede ser la clave para evitar que tu pedido se pierda.

Este tipo de revelaciones no solo dan visibilidad a la labor de los repartidores, sino que también ponen de manifiesto las dinámicas que se producen en las plataformas de reparto. Estar informado sobre estos detalles puede ayudar a mejorar la experiencia de los consumidores y, al mismo tiempo, evitar frustraciones innecesarias.

Si eres de los que piden comida a domicilio, recuerda siempre estar atento a tu teléfono y verificar la dirección de entrega para garantizar que tu pedido llegue sin contratiempos.