"El cura, ya está en casa"

Me lo habéis preguntado cada día: ¿Sabes cómo está don Diego...?. Hoy, puedo contestar con elementos de juicio.

Está bien. El Cura de la Concepción, don Diego Capado, recibió ayer el alta médica, y está en casa, donde deberá guardar unos días de convalecencia antes de reintegrarse a su habitual trabajo en la parroquia.

Es sorprendente que, en una sociedad tan secularizada, el BD sobre el contagio por Covid de un cura haya sido una de mis publicaciones en Facebook más leída, con comentarios más afectuosos y sentidos...

¿Por qué será?. Quizá, pese a la secularización, la religión sigue siendo una de las primeras cuestiones en la vida de la gran mayoría de las personas.

“TEMBLÓ LA ESPERANZA”

Cuando, hace quince días, escribíamos aquí que el salvaje coronavirus había entrado en la Iglesia de la Concepción y al cura lo habían ingresado en un Hospital, el impacto social fue enorme.

Desde el quince de octubre, don Diego, ha estado luchando contra el virus, en una habitación aislada, en silencio y sin perder nunca las fuerzas, la fe y la esperanza.

Al cura de la Iglesia de la Concepción le han dado el alta médica. En su curriculum ya tiene un nuevo titulo: superviviente del Covid-19.

No me extrañaría que el cura de la Concepción incorporara a sus oraciones diarias, una nueva:

“¡Señor!, piedad para el año 2020 cuando, con cincuenta mil muertos y un millón de contagiados, tembló la esperanza ¡BUENOS DÍAS!