Las divinas palabras de Ernesto Medina

Ferdinand de Saussure definió el signo lingüístico como la unidad indisoluble entre el significado y el significante. Id est, el significado se refiere al concepto y el significante a la manera de denominarlo. El micrófono ante el que les hablo es un aparato que transforma las ondas sonoras eléctricas para su amplificación -significado- que se representa mediante la sucesión de los fonemas m-i-c-r-o-f-o-n-o -significante-. Juntos de la mano. Siempre. Igual que el continente y el contenido, pues no puede haber contenido sin nada que lo contenga y viceversa.

Estos axiomas circulan sin preocupaciones ni contradicciones por el mundo hasta que arriban a nuestra ciudad. Al sobrevolar Jaén entran en una crisis existencial que los lleva a dudar de su propia existencia. Se trata de un caso excepcional, producto de una fenomenología exclusiva de nuestra urbe. Los ilustro, dilectos oyentes.

Fue construido un recipiente moderno -el Museo Íbero- para albergar valiosas piezas de arqueología ibérica, pero desde el 11 de diciembre de 2017, fecha de su inauguración, han transcurrido siete años sin que el proyecto museístico y los fondos permanentes hayan llegado. Significante sin significado.

En el mes de abril del año 2009 comenzaron las obras del tranvía. Las primeras pruebas con pasajeros se efectuaron en mayo de 2011. Mas de trece años de vías sin vagones; de vagones sin pasajeros. De continente sin contenido.

Cabe la posibilidad de que la historia de una disociación imposible torne a repetirse con el Conservatorio Superior de Música. Un nuevo edificio en el Bulevar espera instrumentos, música y alumnos. La sede abrirá sus partituras en septiembre de 2025. Siempre y cuando haya atriles en el que colocarlas e instrumentos para reproducirlas. La dotación económica para comprar pianos, clarinetes, trompas o contrabajos se ha recortado hasta dejarla en una sexta parte de lo imprescindible. En esas condiciones las enseñanzas con el mínimo de calidad exigible no pueden garantizarse. Menguarán los alumnos matriculados, muchos procedentes de otras provincias. El Conservatorio Superior de Música de Jaén agonizará incluso antes de haber nacido. Será un huevo sin yema, un folio en blanco sin bolígrafo, un violín sin cuerdas, un significante sin significado, un continente sin contenido.

En septiembre tiene que sonar la música. Que la administración educativa entre en el compás adecuado a la señal de la batuta. Ahora. Porque no es admisible un ultraje más a nuestra ciudad que conlleve que en septiembre sólo escuchemos los sonidos del silencio.

Palabras, divinas palabras