El Ayuntamiento de Oviedo derribará las casas abandonadas de la zona de El Rayo – Mercadin, si sus propietarios no lo hacen directamente o toman medidas para evitar que sigan siendo un nido de okupas y se produzcan incendios como el ocurrido este miércoles.

Lo anunciaba este jueves en COPE el concejal de Urbanismo, Nacho Cuesta remarcando que "si siguen produciéndose estos actos en preexistencias que no se conservan en un debido estado, el Ayuntamiento las derribará con carácter subsidiario por medio de esta ejecución subsidiaria y trasladará su coste a los propietarios". Sobre este particular, insiste los vecinos "pueden tener una total confianza y tranquilidad"..

La zona de El Rayo – Mercadin está ubicada al final del barrio ovetense de La Tenderina, al este de la ciudad, en el límite entre la zona urbana y la rural. Los vecinos hace tiempo que vienen quejándose de la situación de abandono en que se encuentra. Vecinos como Raúl, que contaba en COPE que "hay unas ratas que parecen conejos"

Raúl nos confesaba que tiene "miedo a pasar" cerca de las casas abandonadas, porque "ahí ves cada gente, cada ejemplar...que asusta", a lo que se suma que hay basura, colchones, mantas que "como haya un incendio ahí, no queda nada".

El derribo de las casas abandonadas y la limpieza de la zona, supondrían una importante mejora, pero sigue pendiente su desarrollo urbanístico. Desde la Plataforma Vecinal de la Zona Este ya están recogiendo firmas para reclamar la creación de un parque, tal y como estaba previsto en el Plan General de 2016.

Suso Caña, su portavoz, explicaba en COPE que "se contempla un parque urbano de 80.000 metros cuadrados. Eso está ahí, no lo inventamos nosotros". Además del parque, reclama la urbanización de la zona, con los que "todo eso se sanearía y mejoraría". Y es que, según Suso, "esta es una zona que está todavía a mediados del siglo 20. Aquí el siglo 21 no ha entrado todavía".

Los grupos de la oposición también respaldan estas peticiones, pero cumplirlas no será fácil. El concejal de Urbanismo recuerda que la propiedad de los terrenos está muy atomizada y, mayoritariamente, en manos privadas. Entre Ayuntamiento y la SAREB, la sociedad pública que gestiona los activos inmobiliarios procedentes de la crisis bancaria, no suman ni el 30 %.

Aunque hay negociaciones en marcha, el desarrollo es complicado. "Exploraremos todas las posibilidades", asegura Cuesta, pero "plantear a los vecinos que es sencillo que, propietarios con unos derechos edificatorios, los cedan al ayuntamiento para que este construya un gran parque... creo que por lo menos es hablar con escaso rigor, cuando no, directamente, mentir."