TURISMO
El presidente del CEST denuncia el perjuicio que causa al sector la polémica ecologista sobre Cuna del Alma
Roberto Ucelay cree que perjudica gravemente la llegada de nuevos inversores a Tenerife por la imagen de inseguridad jurídica que se está generando
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Los últimos acontecimientos que han ocurrido en torno al polémico proyecto turístico de Cuna del Alma en el Puertito de Adeje, siguen dejando reacciones. La última, la del presidente del Círculo de Empresarios del Sur de Tenerife, Roberto Ucelay.
Hay que recordar que este asunto, ha sido el detonante de la ruptura del acuerdo de legislatura que hasta la fecha mantenía Sí Podemos Canarias, con el grupo de Gobierno formado por el PSOE y Ciudadanos, tras lo ocurrido especialmente en el pleno del pasado viernes.
Con todo este contexto de fondo, el presidente del CEST y destacado empresario hotelero, ha denunciado hoy en La Mañana de COPE Tenerife que “sin lugar dudas”, este caso “perjudica y va a seguir perjudicando al sector porque supone generar inseguridad jurídica, para cualquier proyecto nuevo”. Ucelay tiene claro que “los inversores del exterior van a ver que es muy complicado sacar un proyecto adelante en Canarias y particularmente en Tenerife”.
El presidente del CEST recordó que este proyecto, “lleva 4 décadas de tramitación”, y que tras todo este tiempo, “el expediente ha tenido su proceso con oposición y ha ido pasando todos los hitos administrativos para poder llegar a este cambio de uso que prevé en el mismo”. En esa línea, añadió que “este proyecto arrancó a mediados de los 80, por lo que ha habido tiempo suficiente estos 40 años para manifestar la oposición correspondiente”.
El dirigente empresarial se sinceró afirmando que “imagínense ustedes lo que supone obtener inversión extranjera para sacar adelante proyectos en el ámbito inmobiliario, con lo compleja es la tramitación administrativa”.
Por último, destacó que “hay que tener en cuenta además que el cambio de uso que se ha ofrecido a los apartamentos y a los bienes inmuebles residenciales para uso turístico, ha supuesto como daño colateral que una parte de las viviendas no esté en el mercado inmobiliario, y en consecuencia se ha encarecido el precio de la vivienda en la zona sur”.