El 'No' a la Inteligencia Artificial de la industria del cine en Guadalajara

¿Has pensado alguna vez cómo será el cine del futuro? Ya no se trata de si lo veremos en 3D o con gafas de realidad virtual, sino de las historias. ¿Cómo serán? Vivimos en un mundo de inmediatez, donde más es mejor. No lo digo yo, basta con mirar las plataformas de streaming. Se prioriza la cantidad de títulos sobre la calidad, lo que supone recortar costes al máximo.

Y ahí es donde entra la inteligencia artificial. Algunos teorizan que, gracias a ella —o por culpa de ella, según se mire—, en el futuro las películas se crearán al instante, a gusto del consumidor. Imagínate: sentarte un sábado por la tarde y pedirle a una IA una película de suspense con toques románticos, generada en cuestión de segundos.

Esto, de momento, es solo teoría, pero la inteligencia artificial ya está provocando tensiones en el sector. También en Guadalajara.

El Festival de Cine Comprometido de Guadalajara, FESCIGU, ha abierto el plazo de inscripción para cortometrajes con una novedad importante: no aceptará obras creadas parcial o totalmente con inteligencia artificial. En un momento en el que la IA está redefiniendo la producción audiovisual, el festival ha tomado una postura clara: la creatividad debe seguir siendo humana. No se trata de rechazar la tecnología, sino de limitar su uso a un rol complementario, defendiendo lo que llaman “talento real”.

Luis Moreno, director del FESCIGU, lo tiene claro: “Hay quienes ven la IA como una forma fácil y barata de producir contenido, y quienes la consideran el fin del talento humano”. Aunque la inteligencia artificial se nutra del trabajo de los artistas para crear contenido, para Luis “no tiene nada que ver con el trabajo original y genuino de un creador”.

La IA evoluciona constantemente. Hace un año, los vídeos generados por inteligencia artificial eran fáciles de detectar. Hoy, herramientas como Sora pueden producir secuencias de varios minutos que parecen filmadas por humanos. “Es una amenaza clara. En solo un año, el cambio ha sido radical. La animación, las voces sintéticas... Todo esto pone en peligro el cine hecho por personas”, advierte Moreno.

Proteger la creatividad humana

Proteger la creatividad humana, es parte del mensaje que quieren hacer llegar con esas nuevas bases que restringen este uso. Aunque se abren a la idea teórica de que la IA puede ser una herramienta cooperativa y no sustitutiva de la creatividad. Las revoluciones industriales, como esta que vivimos, están para quedarse y que “hace mucho tiempo pensar en el Photoshop era una locura y ahora todo fotógrafo lo utiliza”, pero no es lo mismo que “se utilice como herramienta de apoyo a que sea sustituido por algo creado de forma sintética”.

Si quieres participar en el FESCIGU, tienes hasta el 15 de mayo para presentar tu cortometraje. Sin inteligencia artificial, por supuesto.

El festival, que ya va por su edición número 23, ha crecido exponencialmente desde su primera convocatoria en 2003, cuando llegaron 300 cintas en formato VHS. Ahora, con las facilidades tecnológicas, el número de participantes se ha multiplicado. De hecho, esta es otra de las razones por las que han decidido limitar el uso de la IA: “Si la permitimos, podríamos recibir una avalancha de trabajos generados automáticamente”.

El Ayuntamiento de Azuqueca ha abierto sus puertas al certamen, que sigue apostando por un cine comprometido y por la creatividad de los cineastas. Las polémicas pueden estar sobre la mesa, pero las reglas están claras: el talento debe seguir siendo humano.