En Castilla y León ya se puede cazar lobos al norte del Duero “en los casos más conflictivos”

Hasta 2021, en esta región se permitía cazar un total de 145 lobos al año, si bien desde esa fecha, con una protección especial del cánido al norte del río Duero, ha multiplicado su presencia en el territorio y, por tanto, los daños. En 2023, el lobo se ha llevado por delante 5.500 cabezas y en 2024, los ataques se han disparado un 47 por ciento. El 60 por ciento de las manadas campas a sus anchas por un territorio en el que desde hace cuatro años no se le podía dar caza para controlar su población. Hasta la semana pasada. El Congreso ha sacado a la especie de esa especial protección y, de momento, se permitirá abatirlo al norte del Duero. 

José Angel Arranz, Director General de Patrimonio Natural y Política Forestal de la Junta de Castilla y León, ha señalado en Herrera en COPE que es un paso “muy importante” porque “casi nos sitúa en 2021”. De hecho, se trata de un primer paso que permite ya gestionar a la población del lobo y que, “en los casos más conflictivos hacer control”, y, por tanto, cazarlo. Arranz ha señalado que para la caza deportiva, hay que esperar a que se adapte la normativa y establecer planes autonómicos en los que se asignen los cupos de caza. Mientras tanto, en estos primeros meses habrá control de la población.

“El lobo ha llegado y se va a quedar, pero queremos que haga el menor daño posible"

José Angel Arranz

Director General de Patrimonio Natural y Política Forestal de la Junta de Castilla y León

¿Movimiento de manadas?

Con el inicio del control al norte del río Duero surge la incógnita de si habrá movimiento de manadas, algo que no se contempla desde Patrimonio Natural, “las manadas del sur están establecidas y seguirán y tienen territorios ocupados y hay zonas donde la densidad no permite que haya una densidad mucho mayor porque está ocupado todo el territorio”, explican. De esta manera va a seguir expandiéndose por otros territorios como Madrid, Cáceres o La Rioja. 

El objetivo de esta flexibilización al norte es regresar al control de 2021 para reducir los daños. Entonces “El 80 por ciento de la población generaba un 20 de daños, mientras que al sur, el 20 de la población, generaba el 80 por ciento de los daños”, comenta Arranz, quien ha indicado que trabajarán en medidas preventivas. “El lobo ha llegado y se va a quedar, pero queremos que haga el menor daño posible con medidas preventivas”, aclara.