¡Yo soy español, español, español! ¡Oe, oe, oe oe, oe, oe! Estos cánticos y muchos más fueron los que se escucharon anoche en diferentes rincones de la capital salmantina y provincia tras la victoria de España en la Eurocopa frente a Inglaterra. No faltaban los besos y los abrazos. Todos, pequeños y grandes, unidos en una gran celebración.

La verdad es que España partía de favorita y lo demostró con el primer gol de Nico Williams y posteriormente, y casi en los últimos minutos del partido, con el de Mikel Oyarzabal. La Selección Española masculina de fúbol consigue así su cuarto título en Alemania tras obtener los de 1964, 2008 y 2012.

Había que celebrarlo

El árbitro pitaba el final del partido, tras un añadido de 4 minutos, y los salmantinos empezaron a saltar de alegría. Muchos en sus casas con amigos y familias pero muchos otros reunidos en bares, peñas y sobre todo en la Plaza Mayor donde el Ayuntamiento de Salamanca había instalado una pantalla gigante para ver el encuentro deportivo. La ocasión, desde luego, lo merecía. Miles de personas decidieron seguir el encuentro en el ágora salmantina y disfrutarlo. Unos de pie y otros en terrazas.

• Left6:No existe configuración de publicidad para el slot solicitado

La Plaza Mayor de Salamanca y las calles más céntricas de la ciudad se convirtieron por unas horas en los lugares elegidos para lucir con orgullo los colores rojo y gualda.

En otros puntos de la provincia tampoco faltaron las celebraciones y los chapuzones en las fuentes como es el caso de Ciudad Rodrigo.

Hoy se mantienen, en muchos balcones, colgadas las banderas de España recordando la gesta del equipo que dirige Luis Fuentes.