Un cocinero de Nules se asienta en la élite mundial: "A pasito lento pero constante para ir mejorando"

La pasada semana se dieron a conocer en Dubái los The Best Chef Awards, el evento anual que vale para reconocer a los mejores cocineros del mundo. En este caso, la corona se marchó hasta la capital de Dinamarca. Rasmus Munk de Alchemist se alzó con la primera posición, superando a Albert Adriá desde Enigma en Barcelona y a otro danés, Eric Vildgaard desde Jordnær, en Gentofte.

Tras ellos, una lista completa de chefs divididos en 3 categorías dependiendo del número de cuchillos. Con 3 The Best, con 2 World Class y con 1 Excellent. Y en nuestro caso, podemos destacar que en Castellón tenemos un cocinero de clase mundial. Toni Romero natural de Nules y desde Suculent en Barcelona consiguió los 2 cuchillos, y por ello tocaba felicitarlo. Orgulloso por el reconocimiento al trabajo realizado: “Te posiciona a nivel internacional, para el turista gastronómico que viene a Barcelona a buscar los mejores restaurantes. Para nosotros, aparte de ser un orgullo, es algo muy positivo porque el estar en este tipo de lista siempre te va a dar repercusión”.

Un Romero que, eso sí, no pudo ir hasta tierras árabes pese a estar invitado. Y es que al final, los fogones mandan: “A mí me invitaron y no fui porque tengo el 2º de cocina de baja por paternidad y me supo mal no ir. Ya que te invitan yo creo que hay que intentarlo pero me iba muy mal. Me enteré por Instagram”.

Pese a ello, el chef nulense ya se puede decir que se asienta entre los destacados en el panorama nacional, al sumar una nueva nominación en estos premios, donde casi es un fijo en los últimos 5 años.

Apunta el chef que “no me considero que tenga que estar a esta altura, creo que hay restaurantes mejores, pero muy contento. Al final los que votan son otros chefs y prensa especializada. Agradezco mucho el apoyo de los votantes. No es fácil estar ahí. Hemos estado 2 veces entre los 100 mejores y ésta es la tercera”.

apoyo desde casa

De momento, en este nuevo reconocimiento, las felicitaciones no se han hecho esperar. Curiosamente de las primeras fueron de su Nules natal, donde no se olvidan de él pese a la lejanía. Un recuerdo que es mutuo como nos apunta Romero: “He notado mucho cariño, es muy bonito leer los mensajes del pueblo. También viene gente del pueblo, de manera muy recurrente porque estamos lejos”.

Ese empuje que como hemos escuchado que lo nota también en Suculent, donde desde hace 12 años muestra desde la Rambla del Raval de Barcelona sus creaciones, con sabores tradicionales reinterpretados y con algunos denominándolo como el “templo del chup chup”: “Vamos a pasito lento pero constante para ir mejorando. Intentamos aprender y tener la motivación para el cliente se vaya contento y quiera volver”.

Y tras ello, ¿cuál es el próximo paso para Suculent y Toni Romero? Viendo los reconocimientos que faltan, uno podría pensar que aspira a tener pronto la Estrella Michelín, pero el de Nules está con los pies en el suelo. Sin prisa y sin obligaciones.

Nos destaca el chef que “estaría bien, vamos a ver con el tiempo. Michelín es complicado y hay que cumplir ciertos parámetros, que en algunos casos se alejan un poco como el local. Puede caer pero no es una cosas que me obsesione, lo que quiero es trabajar y que la gente se vaya muy contenta, éso es lo que nos llena. Si nos la dan, bienvenida sea, pero no lo queremos forzar porque no queremos cambiar nuestro modelo”.