Hapoel elimina a Valencia Basket y deja la última noche europea de la Fonteta en un tremendo disgusto (92-94)

El Valencia Basket encajó el miércoles un duro golpe, durísimo. Haber peleado desde la primera jornada por tener el factor campo a favor, conseguirlo, y no poder defenderlo en el partido de desempate de las semifinales de la Eurocup, la competición más deseada, por aquello de estrenar el Roig Arena con la Euroliga garantizada. El tiempo nos dirá como digiere esto el vestuario, pero también los despachos. Para el recuerdo, qué pena, que la última noche europea de la Fonteta tuviera este final y eso que el principio fue muy bueno.

La primera secuencia fue un rebote defensivo, una transición y un mate de Pradilla. La segunda, lo mismo pero triple de Costello. La tercera Montero ahogando en defensa a Madar. Badio hasta la cocina. Valentía. Primera premisa cumplida. Fue un siete cero de salida. Motley, con dos canastas, serenaría los vientos. 9-6, minuto 4 y poco después, la primera ventaja visitante, con triple esquinero sobre la bocina de posesión de Blakeney, para 9-11. Un 0-9 de parcial aprovechando algunos tiros con la mano encogida de Reuvers. Blakeney seguía siendo el más suelto y puso un menos cuatro con una suspensión a cuatro metros. Una buena defensa trajo una doble alegría. Canasta con libre adicional y la segunda de Madar. Menos uno. 

López-Arostegui cambió la dinámica con su defensa y Valencia Basket recuperó la delantera. 17-13 con triple de Costello y tiempo de Itoudis. El griego metió más musculo, Caboclo y Motley juntos. Pedro, a Pradilla a comerle la oreja a Motley, y De Larrea con Madar. El niño se estrenó con un triple. 22-15, minuto 10. La Fonteta latiendo. 

Con inteligencia sacó dos tiros libres Larry y puso el más nueve. Más diez con triple de Ojeleye. Qué importante. Más doce, bombita de Montero. 29-17, minuto 12. Foster y Blakeney salieron al rescate, anotando con clase y Badio respondió con un triple tras un cambio defensivo ante Motley. Ellos estaban mejor en este tramo, pero Valencia Basket se las apañaba para ir respondiendo. Pero Sestina atrás sufre y en dos acciones malas suyas Hapoel castigó en pintura y se puso a cinco, 40-35. Los últimos cinco antes del descanso fueron de pelear en el fango, donde Hapoel se mueve bien. Descanso, 45-44. Cosas buenas, solo tres pérdidas. Muchas canastas en pintura recibidas y dominio de rebote de Hapoel. 

La vuelta trajo la temprana tercera de Montero. 47-47, con cámara de Ginat. Fue peor, porque el dominicano metió un triple y recibió técnica por dirigirse al banquillo visitante. Su cuarta. Otros tendrían que dar un paso adelante. 

Madar metió sus primeros puntos en el minuto 24, 53-52. Jovic compensó sacándole la cuarta a Motley. Lo aguantó Itoudis y el pívot falló dos tiros a tres metros que Badio, un tío sin miedo, castigó. Estaba de líder el senegalés, quince para él. Y Jovic. 67-63. Qué locura. La Fonteta latiendo con una fuerza descomunal. Empujando. 

Al último cuarto con sensación de que un tirón y algo de calma podía romper el choque. Había que trabajar ese momento, porque Blakeney seguía sosteniendo a Hapoel. Montero con sus cuatro, de salida. Madar, triple. 67-66. Foster, con un palmeo y un triple, 68-71. Mucho por delante aún, pero ellos mandando, con el partido espeso. Blakeney puso el 68-77 con dos triplazos, con cinco minutos por delante. Minuto. Montero y Sestina. Había que desatascar el ataque. Montero, triple. 71-77. Y después un golpe duro donde más duele. Una temeridad de Caboclo que se ganó en el replay. Antideportiva. Podía ser momento de partido. Los libres, dentro, y desde la banda alley oop para Reuvers. 75-77. Triple de Caboclo. 75-80. Libres de XLA y otro triplazo de Blakeney. 26 para él. Una defensa de XLA y una canasta de Badio, 81-83 a 3:33. Los corazones con taquicardias. Triplazo de Foster. Veinte suyos. Todos importantes. Y qué decir de Blakeney, con otro, 83-89. Cuando peor estaba todo, el coraje llevó a empatar a 92-92 a diez segundos. A 7’7 falta sobre Blakeney. La siguiente ya tiros. Minuto de Itoudis. A 2’7 Foster metió una canasta tremenda. Minuto de Pedro. Pizarra para Nate Sestina, que no acertó un tiro algo desequilibrado y la Fonteta vivió su última noche europea.