La genial rehabilitación del "último camello", un vagón de tren reconvertido en oficina en Vedra (A Coruña)
El arquitecto Fermín González Blanco ha sido el encargado de rehabilitar el vagón de tren conocido como "camello", un FIAT Renfe 593
Santiago - Publicado el - Actualizado
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A mediados de febrero conocíamos el fallo de los premios de Rehabilitación y Arquitectura de Galicia, correspondientes al año 2020. Entre los premiados, destaca un proyecto de rehabilitación de un vagón de tren abandonado reconvertido ahora en espacio de oficinas, co-working. Este vagón lo podemos encontrar en Vedra (A Coruña), en la estación de Santa Cruz de Ribadulla. Esa estación ya no da servicio a los pasajeros, así que todo el espacio se ha rehabilitado.
LA HISTORIA DEL VAGÓN
Se trata de un vagón con nombre propio: "camello". El arquitecto responsable del proyecto de rehabilitación, Fermín González Blanco, contaba en COPE Santiago que el vagón de tren es antiguo y estaba abandonado en Monforte de Lemos. "Llevamos años ya con esta idea, reformulando los espacios de la estación de Santa Cruz, que se han arregaldo muchos metros cuadrados de andén, naves para usos públicos... y esta es la guinda a una intervención de toda el área. La posibilidad de tener un vagón de tren que estaba abandonado y que nos ofrecieron desde la Asociación de Amigos del Ferrocarril. Estudiamos la posibilidad y esta es su historia, que en un primer momento no sabíamos la importancia que tenía el coche".
Se trata de un vagón que llevaba años abandonado: su último viaje fue en el año 1999, entonces cubrió la ruta Santiago-Vigo-Ourense. Se llevó, después, hasta Monforte, para que formara parte del Museo del Ferrocarril de esta localidad lucense porque era "el último de su estirpe, de una serie histórica".
El tren original tenía tres partes: dos cabezas motoras y un coche central de pasajeros. Sus "rescatadores" salvaron lo que pudieron y de las tres partes sacaron una y es la que se ha puesto a disposición de la ciudadanía en Vedra.
EL ÚLTIMO "CAMELLO"
El "Camello" de Santa Cruz de Ribadulla, en el municipio coruñés de Vedra es el último de su serie histórica, no queda ninguno más. Estuvo parado más de 10 años en Monforte y sufrió todo tipo de ataques: vandalismo, se incendió, tiene pintadas... "Empezaba a ser un problema de salud pública", explica Fermín González Blanco: "los que conocen la estación de Monforte saben que tiene una serie de viviendas próximas... y era ya un problema real".
Los vagones tienes una vida útil y "cuando no pueden transitar más se llevan a chatarra, lo habitual no es ir dejando vagones por ahí", nos relata González Blanco, pero este era especial, por eso se conservó en su día. "Los vagones, antes de que mueran definitivamente suelen pasar por varias fases, e incluso algunos se reajustan, se rehacen..."
Este, en concreto, pertenece a la gama de los FIAT 593, que nacieron como una intención del gobierno español de entonces para modernizar la flota de nuestro país, como paso previo a los mundiales del 82: "Fue la mayor compra de trenes que se hizo hasta la fecha para modernizar toda la flota en previsión de que íbamos a recibir a muchos visitantes con todo el mundo del fútbol encima. Iba a ser nuestra puesta en escena internacional como país". Fermín González continúa explicándonos la historia de estos trenes, importantes para nuestro país: "Se compraron dos series: la 593 y la 592 y de la 593 solo queda este"
Esta compra supuso en aquel momento una actualización de los trenes de media distancia de España: "La Transición hecha tren".
"Ahora solo queda este. Las últimas líneas se fueron a Argentina, pero han ido muriendo, han durado hasta el año 2000, más o menos".
¿POR QUÉ SE LLAMAN "CAMELLOS"?
Por sus jorobas, visibles en la parte superior de los vagones. Son trenes que ya venían con aire acondicionado, de ahí esos salientes que se podían confundir con jorobas. Estos trenes, además, tenían cuatro motores, en lugar de los dos de los anteriores. También trajeron una mejoría en cuanto a la acústica y a la comodidad: "eran más confortables por dentro, la estética..." Todo mejoraba.
También nos cuenta González Blanco que supusieron una democratización en el uso de ese tipo de transporte, porque "ya no tenían clases de primera o de segunda, era todo una única clase".
CÓMO SE HIZO LA REHABILITACIÓN DEL TREN
Ahora, ese último camello tiene una nueva vida, dará otro servicio en Vedra. Para su rehabilitación ha habido mucho trabajo detrás, intentando que las instalaciones siguiesen las lógicas del tren original. "La energía viene dada por unas placas solares y la parte de la iluminación sigue la lógica del original, aunque con luminarias de bajo consumo". Relata el arquitecto. En la entrada al complejo y en la zona previa al coche motor se ha construido una pérgola con un sistema de paneles fotovoltaicos en su cubierta para el autoabastecimiento eléctrico del vagón de manera que se ha conseguido que el coworking obtenga un alto porcentaje de su demanda energética de una fuente de energía renovable.
Para el acondicionamiento del espacio interior se ha procedido a la reparación o sustitución de todos los componentes dañados, al retapizado de todos los asientos, la instalación de un nuevo suelo continuo y se ha dotado al coche de acceso a internet y de todo el mobiliario, así como de equipos informáticos y audiovisuales necesarios para cubrir todos los usos posibles.
¿PARA QUÉ SE USA AHORA EL CAMELLO DE SANTA CRUZ DE RIBADULLA?
Será un concurso público del Concello de Vedra quien determine los usos y a quién va dirigido el espacio, pero la idea es que funcione a modo de oficinas o lugar de co-working, donde se fomenten las relaciones profesionales de distintos colectivos.
Si bien el vagón ya está siendo utilizado como sala de reuniones y se han hecho cursos y actividades de todo tipo, incluidas presentaciones de libros. El arquitecto nos invita a pasarnos por aquí: "está abierto a todo el mundo, a la gente le sorprende mucho el espacio abierto que tiene".
El traslado de las instalaciones de Monforte también tuvo sus complicaciones: ya no circulaba por las vías, así es que tuvo que llegar por carretera.