Un salón de belleza bovina en Lugo gestionado por adolescentes: aquí está el futuro del campo gallego
En el concurso de jóvenes manejadores de la Moexmu participan niños y adolescentes que tienen muy claro ya desde pequeños que quieren ser ganaderos

Niños y adolescentes preparan con mimo a sus novillas antes de sacarlas a desfilar por la pista central de Moexmu en el concurso de "Novos manexadores"
Lugo - Publicado el - Actualizado
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Este fin de semana, entre los días 4, 5 y 6 de abril, se celebraba en la localidad de Muimenta, en el municipio lucense de Cospeito, una nueva edición de la Moexmu, una de las ferias decanas en el sector agroganadero gallego, con cuarenta años de historia. El corazón de este evento, un gran escaparate para mostrar al público en general el trabajo que hacen los ganaderos de la comunidad autónoma en sus granjas, es el concurso de vacas de élite de raza frisona, uno de los dos que sobreviven en Galicia.
Pero además de mostrar cómo ha ido mejorando la genética en las granjas dedicadas a la producción de leche en Galicia y cómo se sigue trabajando para mantener una cabaña impecable, desde el punto de vista morfológico y sanitario, este certamen también permite comprobar, año tras año, que el campo tiene futuro, precisamente a través del relevo generacional al frente de las granjas punteras en la provincia de Lugo.
más de cien vacas del noroeste peninsular
Este año participó en el concurso de ganado alrededor de un centenar de reses. Animales que aportaron 18 ganaderías de las provincias de A Coruña, Lugo, Pontevedra y Asturias.
Hablamos de ejemplares impresionantes, sin duda lo mejor de la genética bovina en lo relativo a la producción de leche. Con todo, uno de los apartados que más llama la atención en la pista central de Moexmu es el Concurso de Novos Manexadores, en el que participan niños y adolescentes que incluso a una edad tan temprana tienen muy claro que su futuro está en el campo.

El concurso de jóvenes manejadores es uno de los escaparates más llamativos de las múltiples opciones que ofrece cada año la Moexmu
Cientos de visitantes se quedan prendados cada año de estos chavales que, con mimo y dedicación, van preparando a las novillas que luego ellos mismos presentan al concurso.
Aquellos que llegan desde zonas urbanas, se quedan muchas veces sorprendidos cuando ven como les lavan, les cortan y les secan el pelo. Cómo les echan abrillantador, fijador y las peinan con cuidado para resaltar aquellas partes que más destacan en su morfología y disimular aquellas que son menos perfectas.
Convierten a las terneras en misses por un día y, como tal, las hacen desfilar ante un público que reconoce la presencia de los animales y todo el trabajo que hay detrás por parte de esos jóvenes aprendices de ganadero. En esta edición, una mujer se quedó mirando a una de las novillas que entraba en concurso y, entre risas, dijo: "Creo que esa vaca tiene el pelo más brillante que yo".
claudia y xabi, jóvenes de "sangre" ganadera
Claudia López García, de 13 años, integrante de una familia con una explotación láctea en el municipio de Aranga, lleva participando en concursos desde que tenía solo ocho.
Dice que lleva la ganadería "en la sangre", porque en su casa "siempre hubo una granja", desde tiempos de sus "tatarabuelos".
Le gustan estos certámenes. Prepara con mimo a sus novillas y luego las saca a desfilar por la pista como las modelos bovinas que son. "Entré en pista por primera vez con ocho años y ya no pude parar", nos confiesa.

Claudia López, de 13 años, prepara a su novilla antes de que comience el concurso
Algo parecido le pasa a Xabier Montes Vilar. También empezó a participar en los concursos cuando tenía ocho años. Ahora tiene 17 y nos cuenta que no ha perdido ni un ápice de ilusión.
Hablamos con él en Muimenta mientras acicalaba a una preciosa novilla de raza frisona de la explotación familiar, ubicada en el municipio pontevedrés de Rodeiro.
"A mis padres les gustaba y yo también me metí en esto. Para mí ya es una forma de vida", nos confiesa.

Xabier Montes cepilla a la novilla con la que participó en el concurso de Muimenta
Dice que le gustan "los concursos", pero también preparar "a los animales en casa". De hecho, nos explica que "hay varios niveles de preparación. Primero en casa, para poner a la novilla en forma. También el manejo diario. Después está la preparación el día del concurso, peinarla, echarle abrillantador, gomina y todo eso", aclara.
El objetivo es dejar a las novillas hechas un auténtico pincel.