Despiden a un trabajador de un aeropuerto de Baleares por cómo le pillaron mientras trabajaba: dio positivo

Entre las funciones de este empleado estaban la de empujar y remolcar aeronaves y realizar el guiado de seguridad durante estas mismas operaciones

Avión comercial despegando del aeropuerto de Son Sant Joan de Palma de Mallorca

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Avión comercial despegando del aeropuerto de Son Sant Joan de Palma de Mallorca

José Manuel Nieto

Publicado el

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El Tribunal Superior de Justicia de las Islas Baleares ha declarado procedente el despido disciplinario de un agente de rampa de Ryanair que, durante su jornada laboral, dio positivo en cannabis. Este incidente pone de manifiesto las estrictas políticas de seguridad en los aeropuertos y las implicaciones de no cumplir con las normativas internas que protegen la seguridad de las operaciones aeroportuarias.

El trabajador, que comenzó su andadura en Ryanair como agente de rampa en enero de 2019, fue despedido en junio de 2023 tras dar positivo en una prueba de detección de drogas realizada por la Guardia Civil en el aeropuerto de Palma de Mallorca. Entre las funciones que desempeñaba este trabajador se encontraba la de empujar y remolcar aeronaves, así como realizar el guiado de seguridad durante estas operaciones, tareas que requieren una alta concentración y, sobre todo, no pueden verse afectadas por el consumo de sustancias psicoactivas.

La empresa, en base al artículo 65 del Convenio General del Sector de Servicios de Asistencia en Tierra Aeropuertos (Handling), consideró que el hecho de estar bajo los efectos de las drogas durante su jornada laboral constituía una falta muy grave, ya que ponía en riesgo la seguridad de las operaciones en la plataforma. El trabajador no solo incurrió en esta infracción, sino que también violó los principios de desobediencia y abuso de confianza, lo que llevó a Ryanair a adoptar la decisión de despido disciplinario.

Avión de Ryanair de la aerolínea irlandesa de muy bajo coste fundada en 1984

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Avión de Ryanair de la aerolínea irlandesa de muy bajo coste fundada en 1984

El trabajador, no conforme con la decisión de Ryanair, impugnó el despido, argumentando que no se podía considerar que estuviera bajo los efectos del cannabis, ya que no se conocía el momento exacto de consumo de la sustancia. En primera instancia, el Juzgado de lo Social N.º 6 de Palma de Mallorca dio la razón al demandante, declarando el despido improcedente. En su resolución, el tribunal argumentó que el simple hecho de arrojar un resultado positivo en cannabis no implicaba necesariamente que el trabajador estuviera bajo los efectos inmediatos de la droga.

La demanda por despido improcedente

Sin embargo, Ryanair no se dio por vencida y apeló la sentencia ante el Tribunal Superior de Justicia de las Islas Baleares. En su recurso, la aerolínea defendió su política de “tolerancia cero” respecto al consumo de alcohol y drogas y señaló que la infracción no solo consistía en estar bajo los efectos de las sustancias, sino también en una clara desobediencia y abuso de confianza, además de transgredir la buena fe contractual.

Finalmente, el Tribunal Superior de Justicia de las Islas Baleares falló a favor de Ryanair y declaró el despido como procedente. En su sentencia, el tribunal subrayó que el trabajador desempeñaba funciones de alto riesgo dentro de una zona de seguridad en el aeropuerto, donde la presencia de sustancias como el cannabis podría comprometer no solo su seguridad, sino también la de los demás trabajadores y de los pasajeros. La naturaleza del trabajo en la plataforma aeroportuaria exige que los empleados se encuentren en todo momento en plenas facultades para evitar cualquier accidente o incidente durante las operaciones de empuje y remolcado de aeronaves.

Asimismo, el TSJ explicó que la normativa vigente exige que los empleados que operan en estas zonas de alta seguridad deben evitar estar bajo los efectos de cualquier sustancia psicoactiva. En este caso, la prueba positiva en el trabajador no solo afectaba a su desempeño, sino que también perjudicaba los intereses de la empresa, que se vio obligada a suspender sus actividades debido a la infracción.

Avión de la compañía Ryanair aterrizando en el aeropuerto de Palma de Mallorca

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Avión de la compañía Ryanair aterrizando en el aeropuerto de Palma de Mallorca

El tribunal también señaló que, aunque no se pudiera determinar el momento exacto en el que el trabajador consumió la sustancia, la responsabilidad recae en él por el hecho de haber dado positivo. La normativa y los protocolos de seguridad aeroportuaria no permiten margen de error, y la seguridad de las operaciones es la prioridad.

Herrera en COPE

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