El ejemplo de la misionera en Pakistán que ha fallecido a causa del COVID 19
En Pakistán se recuerda en este día a una misionera que ha dedicado toda su vida a los jóvenes discapacitados
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En Pakistán se recuerda en este día a una misionera que ha dedicado toda su vida a los jóvenes discapacitados. Una mujer que ha dejaod huella y que finalmente ha fallecido a causa del COVID 19.
Todos, cristianos y musulmanes, gente del pueblo y líderes políticos, lloran hoy por la pérdida de la hermana Ruth Lewis, misionera franciscana de Cristo Rey, conocida como la “madre de los olvidados”. Había llegado a Karachi en el lejano 1969 y desde entonces no se ha separado del centro de acogida para discapacitados intelectuales “Dar-ul-Sukun” de Karachi.
En este lugar se cuida de 150 niños y adolescentes abandonados por sus familias que llegan a considerarlos “monstruos”, a causa de sus deformidades y discapacidades. Desde el año 2000 dirigía este centro. La hermana Ruth se había convertido para ellos en una madre, y trabajaba incansablemente para construir su personalidad.
Una figura como la hermana Ruth muestra el rostro misericordioso de la Iglesia católica en Pakistán, que se dedica al servicio de los más pobres y vulnerables sin distinción de etnia, religión, cultura o clase social. Tenía una mirada evangélica de amor hacia estos niños con discapacidad, que se percibía en cada momento de su vida. Su desaparición es una gran pérdida para la misión de la Iglesia y, sobre todo, para estos niños que necesitan cuidados especiales, a quienes ella ha asistido y acompañado durante 51 años de servicio apostólico.
El Gobernador de la provincia de Sindh, Bilawal Zardari, ha dicho que se trataba de una heroína desconocida para muchos, pero que la gente de Karachi la echará mucho de menos. Y ha pedido al Presidente de Pakistán que recompense a título póstumo por sus servicios a la humanidad.