De las bombas a los libros
En mes y medio de guerra en Ucrania 10.000 niños ucranianos han sido escolarizados en colegios de nuestro país

De las bombas a los libros
Madrid - Publicado el - Actualizado
3 min lectura
La guerra en Ucrania ha provocado un éxodo masivo de personas. Más de cuatro millones de refugiados ya han huido del país. Una de las principales vías de escape es la frontera polaca, por donde han cruzado más de dos millones y medio de estas personas. La mayoría mujeres y niños.
Diez mil menores ya han sido escolarizados en colegios de nuestro país y se prevé que esta cifra se duplique en las próximas semanas. Después de las duras imágenes que han visto, llegan en una situación muy vulnerable. Por ello, decenas de centros han puesto su granito de arena y han acogido a varios de estos menores con el objetivo de sustituir el horror de la guerra por una nueva vida.
En Palencia, concretamente en Paredes de Nava han llegado 15 refugiados ucranianos. En el Colegio Alonso Berruguete, se han incorporado a las clases de infantil cinco niños: Verónica, Sasha, Ilia, Mateo y Polina. El director del centro es Antonio Gero. Explica a COPE que aunque la adaptación está siendo buena, se les ha quedado grabada la guerra: ''Ellos de vez en cuando cuentan lo que ha ocurrido allí y suelen dibujar algún dibujo: bombas, tanques, soldados''.
Otra de las claves que permite una mejor adaptación de estos menores refugiados es el idioma. Muchos de estos centros son bilingües, lo que permite comunicarse con los niños en inglés. En el colegio Lope de Vega, en la localidad madrileña de Alcalá de Henares, hay 11 menores ucranianos. Dos de ellos hablan inglés, lo que permite a los profesores comunicarse con el resto de niños. ''Este es un centro bilingüe en el cual todo profesorado sabe inglés. Dos o tres niños se defienden con el idioma y en cosas importantes se lo transmitimos a estos alumnos y se lo comunican en ucraniano al resto. El resto de alumnos les han acogido como si fueran unos más'', explicaba Carmen Domínguez, la directora del centro.
No es el único caso donde niños y profesores se están entendiendo gracias al inglés. En Barcelona, en la escuela El Farell, de Caldes de Montbui, han recibido a 5 niños ucranianos. Uno de ellos es ''Masha'', una niña de 6 años que ha llegado a España con su madre y su hermano que también se ha incorporado a este cole. Su padre, sin embargo, como la mayoría de hombres, se ha quedado combatiendo. Ella habla inglés perfectamente y esto está ayudando a su integración. ''Es una niña que tiene muchas ganas de compartir todo lo que sabe con sus nuevos compañeros. Está feliz, está sonriendo. Participa en todas las propuestas'' relata Yoana, su profesora.
Para una mejor adaptación, otros centros optan por las excursiones extraescolares. En el Colegio Vistahermosa, de Orense, esta semana se organizaba una salida a uno de los ríos de la zona.
Por último, otro de los aspectos a destacar son los gastos que conllevan estos menores. La compra de material escolar, ropa o el comedor no es gratis. En la gran mayoría de centros que está acogiendo a estos menores todos los gastos son asumidos por el centro y por las distintas consejerías de educación de cada región. Unas ayudas con las que intentar facilitar la vida de estos menores y de sus familias tras escapar del horror de la guerra.