'Crónicas perplejas': "A veces somos como un niño que intenta, con sus manos, comprender el mundo"
Habla Antonio Agredano de esa curiosidad que tenemos al desontar objetos, de romper las cosas

Habla Antonio Agredano en sus 'Crónicas perplejas' en 'Herrera en COPE' de aquellas cosas que rompemos o que por nuestra curiosidad desmontamos
Publicado el - Actualizado
1 min lectura
En esta sección de 'Herrera en COPE', Antonio Agredano mezcla lo “cotidiano y exótico” con una particular visión de las cosas de la vida capaz de equiparar con lo más sorprendente en sus 'Crónicas perplejas'.
¿Qué hay en el interior de las cosas? Esa es la gran pregunta. A mi hijo pequeño, a veces, no se le oye. Está por casa y no se le siente. Así que lo busco y, casi siempre, lo encuentro delante de algo, de algún juguete, de algún aparato, mirando en su interior. Desmontándolo. Buscando las palancas. Tratando de entender sus propios secretos.
No sabe Mauro, no sabe mi hijo, que cuando crezca, la pregunta terminará siendo la misma. Pero que ya no estarán los secretos en las cosas, sino en las personas. Y que los mecanismos serán aún más complejos. Y que el miedo a romper no será físico, sino emocional. Y que trasteando, curioseando, entregándonos, también podemos hacer daño.
Todo era más fácil de niños. Un balonazo a la ventana, una figurita de porcelana, una suave regañina… pero nos hacemos mayores, y las grietas van por dentro. A la altura del pecho. Invisibles y profundas.
¿Qué hay en el interior de las personas?, me pregunto. Hasta donde llega el amor. Cuánta es la ternura precisa. Qué equilibrios, qué pasiones, qué delicadeza nos habita.
No hay pegamento que arregle ciertos rotos. No hay cinta aislante que fije las fracturas. Nos toca ser duros. Nos toca seguir. Porque la curiosidad todo lo puede. Porque siempre hay mañana. A veces somos como un niño que intenta, con sus manos, comprender el mundo.
Porque la vida es un misterio que siempre nos sucede de piel hacia dentro.